El derribo de un supuesto globo espía chino generó un gran revuelo la semana pasada en Estados Unidos, que no dudó en considerarlo un instrumento diseñado para el espionaje. Para El Pentágono, no se trató de nada menos que de una “violación inaceptable” por parte de Beijing de la soberanía estadounidense.
Poco después trascendió que, incluso antes de que el primer globo fuera derribado por un misil Sidewinder disparado desde un F-22, otro globo con características muy similares era detectado por la Fuerza Aérea Colombiana, que palabras más, palabras menos, lo monitoreó hasta verlo pasar.
Según el comunicado de la Fuerza Aérea, “el día 03 de febrero de 2023 en horas de la mañana, el Sistema de Defensa Aérea Nacional, detectó un objeto sobre los 55.000 pies de altura, que ingresó al espacio aéreo colombiano en el sector norte del país, movilizándose a una velocidad promedio de 25 nudos, identificándose en él, características similares a las de un globo”.
El objeto fue monitoreado a través de los Sistemas de Defensa, hasta que abandonó el espacio aéreo colombiano. Aunque las autoridades de EEUU aseguran que el globo que derribaron estaba provisto de cámaras y sensores, y que contrario a la versión china tenía al menos alguna clase de control sobre su dirección, la Fuerza Aérea colombiana afirma que “se pudo determinar que este elemento no representaba una amenaza a la seguridad y defensa nacional, así como a la seguridad aérea”.
'Gracias por su comprensión'
Mientras la institución comunicaba que “adelanta las averiguaciones y coordinaciones pertinentes con diferentes países e instituciones, para establecer el origen del objeto”, una portavoz del gobierno chino confirmó ayer que, en efecto, se trataba de un globo de ese país, si bien indicó que era una aeronave de uso civil.
Según reportó The New York Times, Mao Ning, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, reveló en una conferencia de prensa, el lunes 6 de febrero, que “Afectada por el clima y con una capacidad limitada de autodirección, la aeronave se desvió lejos de su curso planeado y entró en el espacio aéreo de América Latina y el Caribe".
En otras palabras, dos globos chinos se salieron de curso sobre el continente americano. A la vez.
El gobierno chino dijo que la decisión de derribar el primer globo, el que sobrevoló algunos de los estados con relevancia en el programa nuclear de EEUU, había sido una clara “exageración” de Washington. Destacó, en cambio, cómo al informar a algunos gobiernos latinoamericanos acerca del segundo globo, había contado con “su comprensión”.
No quedó claro de inmediato si uno de esos gobiernos fue el de Venezuela, cuyo Ministerio de Relaciones Exteriores condenó el domingo "el ataque de Estados Unidos contra un avión civil no tripulado de origen chino". En un comunicado, el gobierno venezolano señaló que "una vez más, Estados Unidos recurre al uso de la fuerza, en lugar de tratar esta situación con la seriedad y responsabilidad que el caso merece".