Hace unos meses cuando el canal de televisión National Geographic presentó serie “Cosmos una odisea del espacio-tiempo” tuve la oportunidad de reencontrarme con el re-make de uno de los programas de televisión que había visto en mi infancia de la mano del científico Carl Sagan. En esta ocasión Neil Degrasse su pupilo, nos dio un recorrido por toda la historia de la ciencia y el cosmos en los cuales una de las cosas que recuerdo haber aprendido en el impactante capítulo 7 fue el terrible efecto que el plomo había ocasionado en el medio ambiente en la década los 60s cuando el científico Clair Patterson trataba de determinar la edad de la tierra, y por un efecto colateral a su investigación encontró que el planeta entero se estaba envenenando con plomo.
Producto de los descubrimientos de Patterson y las interminables luchas políticas que se libraron con los fabricantes de gasolina con plomo y productos con derivados del plomo como la pintura, fue que en Estados Unidos y muchos países del mundo se prohibiera fuertemente el uso del mismo en la gasolina y otros productos, regulando su uso a tal punto, que los niveles mundiales de contaminación por plomo bajaron a niveles aceptables luego de estar en picos críticos nunca antes vistos.
Lamentablemente, y a pesar de los esfuerzos de científicos o mejor dicho héroes como Patterson, hoy en día muchos países utilizan el plomo de manera no regulada para fabricar de toda clase de productos, exponiendo a los consumidores a niveles peligrosos de plomo que pueden afectar el desarrollo de los niños y el funcionamiento del cerebro en adultos o incluso desencadenar en la muerte en casos mas extremos.
Proyecto de regulación de uso del plomo en Colombia
Con estos peligros en mente, y considerando que en Colombia no existe una reglamentación clara sobre el uso del plomo en la fabricación de productos de consumo masivo, como juguetes, tuberías, pinturas y demás, el senado de la república ha puesto en marcha el proyecto de ley 148 de 2015 que busca reglamentar el uso del plomo en el país.
Proyecto de ley 148 de 2015: Por medio del cual se establecen disposiciones para garantizar el derecho de los niños y niñas a desarrollarse física e intelectualmente en un ambiente libre de plomo, se fijan límites para el contenido de plomo en productos comercializados en el país y se dictan otras disposiciones.
La iniciativa del gobierno, tiene como meta reducir los riesgos a los que se exponen los niños colombianos cuando se exponen a productos fabricados en el país o importados, que contengan niveles peligrosos de plomo para su salud, sancionando fuertemente a las empresas o comerciantes que incumplan con esta norma en el momento que entre en vigencia. Por ejemplo el artículo 15 del proyecto de lay sanciona: "Se prohíbe el uso de plomo en juguetes, así como en elementos naturalmente expuestos al contacto directo y potencialmente frecuente por parte de niños y niñas y adolescentes. En cualquier caso no podrán venderse productos para niños y niñas con niveles de plomo superiores a 50 ppm".
Algunos artículos del proyecto de ley como el anteriormente mencionado, han despertado preocupación entre los representantes de la industria tecnológica del país, en relación a que los topes de plomo establecidos por el proyecto de ley son mucho más estrictos que los impuestos en otros países como Estados Unidos. Esto significaría que todos los artículos tecnológicos como celulares, tabletas y demás que entran hoy día al país sin problemas, podrían verse en un predicamento al momento de entrar en vigencia el proyecto de ley.
Según informan los voceros, los artículos de tecnología, contienen niveles de plomo en cantidades que han sido avaladas por no afectar la salud humana según estándares internacionales pero que sin embargo en algunos casos serian superiores a las 50 partes por millón que exigiría la ley Colombiana haciendo ilegal la comercialización de los mismos en el país. Esta situación ha generado dudas en el sector de las TICs y se ha solicitado al gobierno evalúe los topes del proyecto de ley acercándolos a los estándares internaciones, y evaluar las implicaciones que ello podría traer el sector de las tecnologías y su normal desarrollo.
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