Todos hemos escuchado muchas veces en nuestras vidas los terribles casos de corrupción que ocurren en los ámbitos políticos, y hemos sido testigos de muchas injusticias sociales a manos de gobernantes inescrupulosos que desvían dineros de los contribuyentes, pero la historia que se ha revelado en Brasil es definitivamente de ver para creer.
Lidiane Leite es una hermosa jovencita de 23 años que era nada más y nada menos la alcaldesa de Bom Jardim una humilde ciudad de Brasil. Leite ha sido acusada de malversación de fondos del estado dedicados a la educación y se ha dado a la fuga. Por si no fuera ya sorprendente que una jovencita de 23 años con ninguna experiencia en política fuera la alcaldesa de una ciudad, esta historia es todavía más indignante, pues Lidiane ni siquiera vivía en la ciudad que debía dirigir, la joven vivía en una lujosa mansión en São Luís, capital del estado de Maranhão, ubicada a 275 kilómetros de Bom Jardim y mantenía contacto diario con su gabinete únicamente vía WhatsApp.
En 2012 Beto Rocha, un político de larga trayectoria en las barriadas populares de Bom Jardim quería postularse al cargo de alcalde, pero los escándalos de corrupción en su contra se lo impedían, así que luego de postular a Lidiane como candidata (la que luego se convirtiera en su novia) y lograr que ella ganara las elecciones, se convirtió en su asesor principal.
Desde entonces Lidiane solo se dedicó a vivir una vida de excesos y a llenar las redes sociales de fotos en las que lucia sus lujos y mantener comunicación con sus asesores únicamente por un grupo de WhatsApp, hasta la semana pasada, cuando el sistema escolar de Bom Jardin entrara en crisis luego de que los maestros denunciaran que llevaban varios meses trabajando sin recibir su sueldo. Cuando todo el escandalo se desato, Lidiane emprendió la fuga y ahora es una fugitiva de la ley. En su contra pesan acusaciones por más de 4 millones de dólares desviados.
Imagen de Lidiane: Infobae
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