La música electrónica es una forma de arte que ha tenido una enorme evolución en muy poco tiempo en comparación con otros géneros musicales que llevan décadas de existencia. Y una de sus principales ventajas en precisamente lo poco convencional que resulta su proceso creativo y los gadgets tecnológicos que se usan.
Las pistas de música electrónica pueden o no incorporar instrumentos musicales tradicionales, pero casi siempre su base es la computadora o una consola de mezcla, donde el DJ combina secuencias de sonido y aplica efectos para generar una melodía única que se conecta con su público en vivo y reacciona a sus emociones. Pero ¿Qué dirías si vieras al DJ pararse de su sitio e interactuar e incluso bailar con su público mientras aun crea su música? Bueno esa es parte de la propuesta detrás de ARQ, un curioso instrumento musical del futuro que podría revolucionar la forma de hacer música electrónica.
ARQ es un arco luminoso que esta lleno de pequeños botones sensibles al tacto; el dispositivo entero tiene conectividad inalámbrica e incorpora acelerómetros en los 3 ejes que le permiten medir sacudidas y movimientos en cualquier dirección. La idea detrás de ARQ es que el DJ controle la reproducción de las diferentes mezclas, su velocidad, y muchos otros parámetros solo con este pequeño arco en su mano y los movimientos que haga con el sumando a los botones que se presionan para lanzar los sonidos.
En otras palabras ARQ es como una pequeña batería de sonidos, un sintetizador, un lanzador de secuencias de audio, y controlador MIDI todo en uno. Para los DJ mas exigentes, el ARQ además cuenta incluso con una base en la cual se han incorporado la mayoría de los controles de sonido tradicionales de una consola de DJ, lo cual hace posible para el artista combinar la consola con el ARQ para hacer pausas entre ponerse en pie para interactuar con su audiencia, y regresar para hacer ajustes detallados. La base de ARQ puede funcionar de forma independiente o conectada a una computadora, y el arco ofrece una autonomía de hasta 5 horas, suficientes para una sesión completa, todo por unos $600 dólares.
Tal vez ARQ no sea el primer instrumento para DJ mas extraño que hallamos visto, pero definitivamente si marca una tendencia frente a lo que la tecnología puede hacer por el ámbito musical. Esperemos que dispositivos como este le den mas libertad creativa a los músicos del futuro.