Cada mes Microsoft nos inunda de parches de seguridad. Lo hace con los célebres "Patch Tuesdays" o "martes de parches", una singular tradición que hace que en los últimos años podamos acceder a las últimas actualizaciones de seguridad.
Ayer tuvo lugar la última de estas actualizaciones, y fue una especialmente destacable: con ella se corrigen nada menos que 129 vulnerabilidades, 11 de ellas críticas. De hecho en los últimos cuatro meses siempre se han superado las 110 amenazas parcheadas, algo que demuestra lo importante que es actualizar nuestro PC con Windows 10.
Cientos de vulnerabilidades nos amenazan cada mes
Microsoft tiene un problema con las vulnerabilidades: no paran de descubrirse, algo lógico teniendo en cuenta que es el sistema operativo de escritorio más utilizado del planeta.
Eso ha hecho que el ritmo de aparición de posibles agujeros de seguridad sea normalmente creciente. En los últimos cuatro meses, por ejemplo, se han contabilizado siempre más de 110 vulnerabilidades corregidas por estos "martes de parches".
En esta edición de junio de 2020 nos encontramos con 129 correcciones de vulnerabilidades, de las cuales 11 están marcadas como críticas por parte de Microsoft.
La cifra es notable y de hecho consolida las nada menos que 616 vulnerabilidades parcheadas a lo largo de todo el año: si todo sigue a este ritmo, en pocos días estaremos al mismo nivel al que acabó 2017, por ejemplo.
Eso demuestra que los responsables de Windows 10 corrigen más vulnerabilidades que nunca, sea eso indicativo de que tienen más trabajo que nunca o no (puede que simplemente estén apareciendo muchos más riesgos de seguridad).
Estas actualizaciones están separadas de esas grandes actualizaciones bianuales que se producen desde que apareció Windows 10 en julio de 2015.
La última de ellas, la May 2020 Update, sigue en proceso de despliegue: algunas incompatibilidades aparecidas en diversos tipos de equipo ha hecho que una vez más acceder a esa gran actualización esté retrasándose en los equipos de muchos usuarios. Microsoft está siendo cauta para evitar problemas y se espera que la disponibilidad global de esta gran actualización se produzca pronto.
¿Por qué los martes y no cualquier otro día?
El origen de estos "martes de parches" es curioso: todo empezó con Windows 98. Microsoft integró el sistema Windows Update que permitía comprobar si existían actualizaciones de Windows y sus componentes para descargarlas e instalarlas.
Aquella idea era estupenda, pero no estaba exenta de problemas. El primero, que algunos usuarios no conocían la herramienta y no la utilizaban, lo que llevó a Microsoft a notificar de forma clara esas actualizaciones para dar a los usuarios la posibilidad de instalarlas.
La segunda, la de que ciertos parches podían acabar estropeando algo que ya funcionaba por ejemplo para clientes corporativos. La frecuencia con la que aparecían esos parches hacía incómodo todo el proceso, y la sensación era la de que el sistema siempre estaba necesitado de esos parches.
Microsoft decidió modificar el comportamiento de esas actualizaciones, y comenzó a agruparlas y notificarlas de forma mensual para distribuirlas el segundo (aunque a veces es el cuarto) martes de cada mes. Lo hace así desde octubre de 2003, y eso permitía a los administradores de sistemas y a los usuarios estar preparados para estas actualizaciones conjuntas.
Se eligió el martes porque precisamente maximizaba el tiempo disponible antes de que llegara el siguiente fin de semana para corregir problemas, pero también dejaba libre el lunes para solucionar potenciales conflictos que hubieran surgido en el fin de semana precedente.
Sea como fuere, el consejo siempre es el mismo: si os aparece una notificación de Windows 10 en la que se avisa de que ya están disponibles nuevos parches de seguridad —Microsoft no los califica oficialmente "martes de parches" en esas notificaciones aunque el mundo los conozca así—, lo más recomendable es siempre aplicar esas actualizaciones lo antes posible para atajar cualquier problema de seguridad.