No se ven demasiados Chromebooks en España y Europa, pero eso es algo que Google quiere remediar: la empresa ha anunciado una oferta renovada de modelos que en las próximas semanas estarán disponibles a través de más distribuidores.
La idea es la de impulsar el uso de unos equipos que han ido ganando prestaciones manteniendo casi siempre un perfil de precios asequibles. Chrome OS es una alternativa muy interesante para diversos escenarios como el educativo, aunque la oferta de momento no incluirá algunos de los modelos más llamativos con un sistema operativo que no ha hecho mucho ruido últimamente.
Chrome OS sigue siendo una apuesta válida
Cuando Google lanzó al mercado Chrome OS lo hizo con una idea singular: la de centrar toda la experiencia en el navegador Chrome. Buena parte del tiempo que estamos ante el ordenador lo pasamos en un navegador con el que nos conectamos a servicios y aplicaciones web.
La empresa de Mountain View aprovechó esa realidad para poner en marcha una plataforma fácil de usar y compartir y que destacaba por su arranque rápido, sus actualizaciones en segundo plano o su concepción de seguridad, heredada de ese sandboxing que ya había dado muy buenos resultados en Chrome. Hasta Microsoft lo adaptó hace unos meses para aprovechar ese concepto de aislamiento de procesos.
En los últimos años hemos visto mejoras destacables como el soporte de aplicaciones Android y de la tienda Google Play o el acceso a una terminal Linux que puede serle útil a los desarrolladores.
Las actualizaciones son frecuentes, aunque no suele haber grandes revoluciones y sí mejoras que pulen poco a poco lo que ya había, un enfoque que se beneficia además de actualizaciones en segundo plano que son transparentes para el usuario y que "no molestan".
Lo que sí nos quisieron destacar los responsables de Google al anunciar esta nueva iniciativa era esa capacidad de los Chromebook de trabajar tanto online como offline: Chrome OS permite utilizar diversas aplicaciones (como las ofimáticas) con el enfoque de los equipos tradicionales basados en Windows 10 o macOS: no trabajar conectado es perfectamente posible, aunque ciertamente el enfoque de los Chromebooks es el de aprovechar esos servicios y aplicaciones web y Android.
Una oferta hardware renovada, pero incompleta
La oferta hardware se va renovando, pero lo hace de forma mucho más tímida de lo que ocurre con los portátiles basados en Windows 10. La propia Google lleva años sin renovar sus célebres Pixelbook de gama alta, aquellas máquinas que iban un paso más allá a la hora de competir con portátiles más potentes.
El testigo lo cogió este año Samsung con un Galaxy Chromebook realmente destacable. En los últimos días hemos visto como Lenovo lanzaba su Chromebook Duet en Estados Unidos con un formato "Surface Pro" modesto, estupendo y un precio de 279 dólares que de hecho incluía el teclado. Google sí lanzó un modelo de gama media, el Pixelbook Go, en octubre de 2019. Ninguno de estos modelos especialmente destacables estarán de momento disponibles en nuestro país.
Aún así en Google renovarán la oferta de Chromebooks disponibles con formatos diversos: desde portátiles puros a convertibles, en una oferta que cubre diagonales de pantalla que van desde las 11 a las 15,6 pulgadas y con precios que parten de los 299 euros.
Esos nuevos equipos, destacaba Google, incorporan a menudo más memoria, procesadores Intel Core y más capacidad de almacenamiento, una demanda tradicional de los usuarios a pesar de que estos equipos se usan mucho más online que offline.
Los equipos comenzarán a llegar estos días a más distribuidores que nunca para que los usuarios puedan encontrarlos fácilmente, aunque no todos los de la imagen lo harán al mismo tiempo: irán llegando gradualmente al mercado y estarán disponibles en su totalidad en las próximas semanas.