Los rumores del iPhone 8 no se detienen, y es que cada que Apple va a dar un salto importante en materia de hardware con su nuevo buque insignia, el mundo entero queda a la expectativa, y parece que este año la empresa de la manzana se ha propuesto a hacer cambios importantes en su próximo teléfono, con la posible jubilación del Touch ID.
Aunque ya habíamos escuchado hace unos meses que el próximo iPhone 8 incluiría un scanner facial para ayudarnos a desbloquear el teléfono, la novedad hoy que nos llega de la mano de Bloomberg, es que, según sus fuentes, este novedoso scanner facial aparentemente no sería un agregado, sino un reemplazo del Touch ID que viene acompañando al iPhone desde su quinta iteración en 2013.
Un botón menos para ganar espacio al frente
El scanner facial incluso funcionaría cuando el teléfono esté sobre una mesa, sin necesidad de estar cerca al rostro del usuario o directamente enfocado hacia él.
De acuerdo a las filtraciones, el nuevo escáner facial usaría un sistema de reconocimiento 3D que le permitiría percibir la profundidad de campo, y analizar una cantidad de información biométrica más amplia que la contenida en una huella dactilar. De esta forma, al menos en concepto, este método de autenticación sería más seguro y presumiblemente más rápido que el actual Touch ID, siendo inmune a tácticas comunes de engaño como una fotografía.
La posible salida del Touch ID como sensor principal del próximo iPhone también podría haber estado influenciada por la necesidad de Apple de remover el botón de home del frente, dejando una pantalla sin bordes tan amplia como la que vemos en el actual Galaxy S8. Además de acuerdo a Bloomberg, la misma tendría por primera vez, un panel OLED con tecnología ProMotion como la del actual iPad Pro, por lo que estamos frente a uno de los posibles cambios más radicales que Apple haya hecho en un iPhone, algo totalmente digno del decimo aniversario.
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