Si no puedes dominar un sector, cambia las normas del juego para reconstruirlo a tu imagen y semejanza. Esa parece ser la nueva estrategia de Google de cara a la mensajería instantánea, un ámbito en el que lleva más de diez años lanzando diferentes aplicaciones que no han terminado de calar ni conseguir competir con WhatsApp y compañía.
Tal y como le ha contado a The Verge Anil Sabharwal, responsable del proyecto, Google ha estado negociando durante meses con las mayores operadoras del mundo para crear una nueva tecnología con la que reemplazar el SMS. Se llamará simplemente 'Chat', y que será el nombre comercial en la capa de presentación del estándar RCS presentado por Google el año pasado. La idea es adoptarla y crear alrededor una nueva aplicación que simplifique la experiencia de la mensajería como hace iMessage en iOS.
Antes de encargarse de este proyecto, Sabharwal también fue el responsable de las aplicaciones de Google Photos, unas de las más exitosas de la empresa del buscador en los últimos años. El compromiso de la empresa es tal con este nuevo movimiento, que Google ha pausado el desarrollo de la aplicación Allo de mensajería para centrarse en esta nueva.
Chat, el nombre para popularizar el RCS
Chat no será exactamente una nueva aplicación, ni un nuevo estándar. Será el nombre con el que se conocerá al RCS para hacerlo más atractivo a los usuarios, y su implementación empezará con un nuevo set de opciones para la app Mensajes de Android. Ni Google Chat, ni AT&T Chat, simplemente Chat para todos.
Para ello se implementarán las funciones básicas de cualquier app de mensajería de hoy en día, como los avisos de que el mensaje se ha leído, las indicaciones de que alguien está escribiendo, mensajes grupales o imágenes y vídeos de alta resolución. Al tratarse de un estándar y no una nueva aplicación, las diferentes apps que puedan hacer las operadoras u otros terceros serán compatibles entre sí.
Y en el caso de que escribas uno de estos mensajes a alguien que todavía no tenga Chat (RCS) o no sea usuario de Android, el mensaje será enviado en formato de SMS. Esto es lo mismo que hace iMessage de Apple, pero recordamos que la diferencia está en que Chat no es una aplicación, sino un tipo de tecnología.
Todavía no se sabe cuándo se empezará a implementar este estándar, pero Google es optimista con ello y ya ha hablado con múltiples operadoras para intentar empezar a activarlo a finales de año. Además, la idea es que Chat entre en tu plan de datos como lo hacen actualmente los SMS. Este es un punto importante, porque si las operadoras intentan empezar a cobrar por el nuevo estándar como hacían antaño con los SMS todo estará llamado al fracaso.
La estrategia por lo tanto está clara. Google tira la toalla en el sector de la mensajería instantánea, y en vez de seguir intentándolo va a promover un nuevo estándar que puedan controlar. Un ejemplo de esto está en el ya mencionado abandono de Allo, y que próximamente empezará a implementar nuevas opciones en la aplicación Mensajes de Android, como la búsqueda de GIFs o Google Assistant.
Se trata de una jugada que podría ser redonda si les sale bien, ya que a excepción de Samsung y algún que otro fabricante más, la mayoría de ellos ya tiene la aplicación Mensajes de Google como predeterminada para SMS en los móviles Android. Por lo tanto, la empresa del buscador ya tendría toda una enorme base de usuarios para empezar.
Además, también le permitirá cierto margen de maniobra a los fabricantes que no tengan la app por defecto de Android. Por ejemplo, Samsung podría actualizar su aplicación de SMS para incluir esta tecnología y las nuevas funciones que ofrece, y haciéndolo estaría apoyándola indirectamente y ayudando a Google aún sin usar su app.
RCS: entre el futuro y el fracaso
La idea de Google parece muy buena, lanzar un nuevo estándar junto a las operadoras para competir con WhatsApp, y de paso convertir una aplicación que casi todos los usuarios de Android tienen instalada en una de referencia, que además sería compatible con otras de operadoras o fabricantes. Sin embargo, hay algunos problemas que pueden comprometer el futuro de su adopción.
La primera es la privacidad. Como el SMS, Chat no estará cifrado de extremo a extremo, por lo que los mensajes que enviemos podrán ser interceptados. Puede que a la mayoría de usuarios eso no les importe demasiado, pero con los esfuerzos que se están haciendo para concienciar sobre la importancia de la privacidad, parece un disparo en la dirección contraria que podría pasarles factura.
El segundo problema es que los apoyos no se traducen en despliegue. Tal y como ya nos contaron en Xataka Móvil, con la calculadora en la mano Chat y su estándar RCS podrían llegar a los 350 millones de usuarios al empezar a desplegarse con la ayuda de las operadoras. Estos son más de los que usan apps como Telegram, pero queda a años luz de WhatsApp y sus más de 1.500 millones de usuarios.
De hecho, casi podríamos decir que WhatsApp ya se ha convertido en un estándar en sí mismo a ojos de los usuarios básicos, por lo que sacarles de allí sin que lo vean una complicación puede resultar bastante difícil. Eso no quiere decir que sea imposible, pero desde luego que sólo con el apoyo de operadoras no va a ser diferente, y van a tener que invertir muchos esfuerzos en explicar la nueva tecnología e intentar vender sus beneficios.
Entre estos beneficios no parece estar el poder comunicarse con todo el mundo. En la nota de The Verge se habla en todo momento de usuarios de Android, por lo que a no ser que Apple acabe apoyando el estándar se creará una barrera con los usuarios de iPhone difícil de salvar. De quien sí tienen el apoyo es de Microsoft, o sea que será interesante ver a dónde se podría llegar si se incluye una aplicación en Windows 10.
En Xataka Móvil | RCS, el sustituto de los viejos SMS impulsado por Google y los operadores, sigue llamado a fracasar