Hecha la ley, hecha la trampa, y hecha la tecnología, hecho el hackeo (al menos muchas veces). Las llaves de coche inalámbricas ya entran dentro de esta especie de norma. y por ello en Kia han ideado una posible solución para evitar que se hackee la llave obteniendo su frecuencia.
Se trata de la caja KiaSafe, la cual se fundamento en el principio de la jaula de Faraday. La idea es que esta pequeña funda evite que se acceda al sistema y se tome el control del coche, como vimos que lograban en un Tesla S.
A grandes males, pequeños remedios
Como decíamos, el fundamento es el efecto por el cual se anula el efecto de los campos electromagnéticos externos por una serie de fenómenos físicos conocido como jaula de Faraday, que de hecho ya vimos que inspiró a los de Nissan para evitar que se use el móvil en el coche. Y es algo tan sencillo como una funda para las llaves, de modo que se elimina la posibilidad de acceder al sistema y averiguar la frecuencia de la llave, con lo cual se accedería al coche.
Se trata de KiaSafe, una idea del fabricante Kia que dispone de coches que se abren de este modo, valiendo tanto para coches nuevos como para quienes ya disponen de él. Al menos hasta que las llaves tengan un botón de sleep o señales de ultra ancho de banda, dado que según explica la marca sus ingenieros están trabajando para que las futuras llaves inalámbricas en sí puedan escapar a los hackeos.
La funda tiene un coste de 10 libras esterlinas (unos 13 euros), y en principio es compatible para cualquier llave (sea de un Kia o no). Así que al menos hasta que mejoren las llaves existe esta sencilla solución, aunque el fabricante recomienda que además se tenga cuidado por ejemplo al no dejar la llave cerca de ventanas y puertas en casa.
Veremos si en un futuro idean algo más seguro para que este tipo tan especial de ladrones no sean capaces de robar coches aprovechando estas tecnologías y sus fallos de seguridad. Ya vimos que Tesla por su parte tenía una manera más original de lograr averiguar los fallos en la seguridad de sus coches a nivel software: regalar un Tesla Model 3.