Los organismos reguladores de la UE aprobaron la adquisición de Activision Blizzard por parte de Microsoft, en una decisión que es un espaldarazo a la intención de la firma de Redmond. Sin embargo, el negocio de 68.700 millones de dólares sigue siendo incierto, ya que Microsoft continúa enfrentando obstáculos regulatorios en muchos otros lugares.
Gran parte de la deliberación de los investigadores de la UE se centró en cómo se manejarán tras la adquisición los juegos en la nube, un punto que ven como clave para derrumbar las barreras del actual sistema de consolas.
Para las autoridades europeas, los juegos en la nube permitirán a las personas transmitir juegos de manera efectiva desde los servidores, eliminando la necesidad de hardware dedicado.
Por eso la Comisión Europea aceptó como significativo el compromiso de Microsoft de permitir la transmisión de los juegos de Activision a través de "cualquier servicio de transmisión de juegos en la nube de su elección" para los consumidores y proveedores de nube en la UE.
Falta mucho todavía
Sin embargo, los reguladores del Reino Unido bloquearon previamente el acuerdo, citando preocupaciones sobre la reducción de la competencia en el mercado de juegos en la nube. La apelación de Microsoft contra la decisión del Reino Unido aún está en curso.
"Los compromisos ofrecidos por Microsoft permitirán por primera vez la transmisión de sus juegos en cualquier servicio de transmisión de juegos en la nube, mejorando la competencia y las oportunidades de crecimiento. Nuestra decisión refleja la importancia de ese paso". Margrethe Vestager, VP de política de competencia de la Comisión Europea.
Microsoft se ha enfrentado a la oposición de los reguladores y algunos de sus rivales, incluido el fabricante de PlayStation, Sony. Además de anunciar que llevaría los juegos de Xbox PC al servicio de juegos en la nube de Nvidia, Microsoft también firmó un contrato de 10 años con Nintendo para llevar su exitosísimo franquicia Call of Duty a las plataformas del gigante japonés si el acuerdo de Activision se concreta.
Aunque varios otros países, incluidos Arabia Saudí, Brasil y Japón, han aprobado el acuerdo, este no ha sido revisado aún en China, Corea del Sur, Nueva Zelanda y Australia. El mayor obstáculo se encuentra en Estados Unidos, donde la Comisión Federal de Comercio ha demandado para bloquear el acuerdo, con una audiencia programada para agosto. La adquisición de Activision Blizzard por parte de Microsoft, por lo tanto, está lejos de completarse.