Las distancias cuando hablamos del universo suelen ser de años luz o millones de kilómetros, pero aún así las colisiones entre elementos están a la orden del día. A estas alturas nosotros ya tenemos miles de ojos puestos en el cielo, pero aún así somos susceptibles de que choque contra nosotros un objeto espacial, y con tal de controlarlo al máximo la NASA tiene un censo de los asteroides que nos rodean, acabadito de actualizar.
No es un trabajo nuevo o reciente ni mucho menos. La agencia estadounidense lleva haciendo este particular recuento desde hace años y de hecho con el nuevo informe llegan a una conclusión similar al que presentaron en 2003: debemos tener un control de los asteroides que miden al menos 140 metros. Es decir, aquellos que supondrían el mayor riesgo si por algún motivo dejasen de orbitar para precipitarse a nuestro planeta.
Sólo hemos visto la punta del asteroide
No hace mucho hablábamos de la basura espacial. Un problema que nosotros mismos nos hemos ido buscando a medida que las carreras espaciales han despegado (nunca mejor dicho), y que supone un peligro para otras misiones como ya vimos por toda esa nube de restos que ha quedado orbitando.
Pero sin nuestra intervención el espacio también dispone su materia a nuestro alrededor, y aunque no suele haber colisiones que supongan una amenaza de alto impacto contra nuestra superficie de vez en cuando hay meteoros que por su tamaño llegan a atravesar todas las capas de la atmósfera y ocasionar daños al estrellarse. De ahí que sea importante tener controlada toda esta población de asteorides que nos rodea, que no es pequeña.
Así, hace un par de años decidieron actualizar aquel estudio de 2003 usando la tecnología del momento y ha sido 2017 cuando han acabado dicha actualización. Es decir, más de 10 años de evolución tecnológica con todo lo que eso implica a nivel de técnicas de rastreo, ópticas y demás.
Una de ellas, tal y como explica Lindley Johnson (Oficial de Defensa Planetaria de la NASA) y recogen en la web de la NASA, es el uso de infrarrojos, la cual vimos al hablar de las distintas tecnologías de los telescopios espaciales. Una radiación útil para determinar el tamaño de estos objetos que nos rodean.
¿Y cuántos hay? El censo en realidad aún no está al 100%, de hecho el objetivo es que en 2020 se tenga un 90% de los objetos de al menos 140 metros controlados, lo cual asciende según el Science Definition Team a unos 25.000. Hasta la fecha se han catalogado algo más de 7.800 asteroides, y la NASA espera ampliar estos descubrimientos con 500 más gracias a los telescopios terrestres.
Aún hay mucho que ver... Y pocos ojos
Según explican en la agencia, la importancia de completar este censo radica en el porcentaje de riesgo para la población humana de que haya un impacto no previsto. De completarse el objetivo de tener registrados esos aproximadamente 25.000 objetos, se eliminaría el 99% del riesgo de que hubiese uno de estos impactos imprevistos.
No obstante, la NASA se muestra algo pesimista con respecto a este objetivo a tres años vista. Si bien en los últimos 15 años las distintas técnicas y el conocimiento de los astrónomos acerca de estas rocas que nos rodean han mejorado, entendiendo mucho mejor el tamaño y el albedo de los asteroides, la agencia estadounidense considera que se necesitarán recursos más allá de los telescopios en tierra para llegar a la meta de 2020.
Mientras se completa el catálogo, lo que ya vimos que también está en estudio continuo son los métodos para poder evitar que un cuerpo espacial impacte contra nuestro planeta. A su vez, y quizás buscando ese refuerzo que deja ver la NASA que es necesario para los telescopios en superficie, hablamos de Scout, una herramienta enfocada a mejorar la detección y la caracterización de estas rocas potencialmente peligrosas.
Imagen | NASA/Goddard/University of Arizona En Xataka | Así nos preparamos para evitar el impacto de asteroides contra la Tierra: si no puedes con el enemigo, desvíalo