Los productos de la compañía más valiosa del mundo están en el ojo del huracán por la pasta térmica barata que muchos de sus socios y ensambladores utilizaron para instalar las tarjetas de la serie RTX 40.
Aunque no se trata en rigor de defectos de fabricación en las tarjetas gráficas de gama alta de la serie GeForce RTX 40 de Nvidia, estas sí terminan sufriendo un defecto crítico: una pasta térmica deficiente.
Una revisión independiente comprobó que la mayoría, si no todos, los proveedores de tarjetas gráficas de terceros en el ecosistema Nvidia están utilizando un compuesto térmico barato y de rápido deterioro en sus productos de la serie RTX 40.
La pasta térmica -también llamada silicona o masilla térmica- se utiliza en los computadores para mantener bajas las temperaturas del procesador y la tarjeta gráfica. El producto está compuesto de micropartículas de carbono y facilita la transferencia de calor al crear un efecto disipador.
Problemas serios, solución simple
El problema para los usuarios de Nvidia es que la mala calidad de la pasta empleada ha provocado casos comprobados de temperaturas peligrosamente altas. Docenas de usuarios llevaron su descontento a redes sociales, y muchos dijeron experimentar un rendimiento de refrigeración deficiente.
La investigación de Wallossek profundizó, descubriendo los impactantes detalles de la composición de la pasta térmica. Un rendimiento inicialmente impresionante da paso rápidamente a un declive dramático a medida que la estructura de la pasta se descompone.
El examen microscópico reveló una fórmula cargada de grandes partículas de óxido de aluminio que aceleran el deterioro de la pasta. Esto, combinado con una base aceitosa que se seca rápidamente, da como resultado un compuesto térmico que está lejos de la calidad superior que se espera en las tarjetas gráficas de gama alta.
Si bien la situación es alarmante, existe una solución relativamente simple. Los jugadores que experimentan problemas térmicos a menudo pueden resolver el problema volviendo a pegar sus tarjetas gráficas con una pasta térmica del mercado de accesorios de alta calidad. Este proceso económico y sencillo puede mejorar significativamente el rendimiento de refrigeración y prolongar la vida útil de la tarjeta gráfica.
Con todo, este descuido aparentemente menor se traduce en una carga financiera significativa para los consumidores. El sobrecalentamiento de las GPU debido a una falla de pasta térmica puede provocar fallos de funcionamiento y posibles daños en el hardware. Mientras que algunos usuarios pueden sentirse cómodos con hacer el pegado ellos mismos, otros incurrirán en tarifas de de reparación, lo que agregará costos a la inversión inicial.
En casos graves, el sobrecalentamiento puede dañar permanentemente la tarjeta gráfica, lo que requiere un reemplazo completo. Teniendo en cuenta el precio premium de la serie RTX 40, esto se traduce en un golpe financiero para los consumidores que podrían tener que desembolsar cientos de dólares por una nueva tarjeta.
Ver 2 comentarios