Una empresa más parece estar ingresando en el turbulento huracán en el que se encuentra Volkswagen luego que admitiera públicamente que algunos de sus vehículos hacían trampa durante las pruebas oficiales de emisión de gases, todo esto para mostrar niveles considerablemente inferiores durante la misma.
El turno parece ser ahora para Samsung, uno de los fabricantes de electrodomésticos más importantes del mundo. Las acusaciones provienen de Europa a través de un laboratorio de estudios y pruebas independientes, quienes alegan que algunos de los modelos de televisores de Samsung registran un consumo considerablemente mayor de energía en el uso cotidiano de lo que muestran los resultados de las pruebas oficiales, creando la pregunta de si la compañía ha programado de alguna forma a sus televisores para burlar las evaluaciones.
El caso ya ha hecho eco en Europa y Estados unidos, y la comisión europea encargada de hacer las pruebas oficiales ha mencionado que va a iniciar una investigación al respecto para determinar si existe o no una presunta violación de los protocolos de la prueba por parte de Samsung.
Por su parte, Samsung se ha pronunciado, negando rotundamente las acusaciones del laboratorio independiente asegurando que la función “motion lighting” que incluyen la mayor parte de sus nuevos modelos de televisores, es un sistema que viene de fabrica activo y que ajusta el brillo de la pantalla dependiendo de las condiciones de imagen que se presenten en el momento, como por ejemplo una escena con muchos cambios rápidos en imagen como una escena de acción de una película o un evento deportivo, o por el contrario una situación en la que la imagen es prácticamente estática como navegar o leer un correo.
Dicho sistema según reporta Samsung se encuentra activo en todo momento y no fue diseñado para activarse o comportarse de forma distinta durante las pruebas oficiales de consumo energético. “No se puede comparar el sistema motion lighting con los dispositivos que Volkswagen instaló para burlar las pruebas de emisiones” dijo un vocero de Samsung. “Este sistema no es una opción que se activa únicamente durante las pruebas. Por el contrario, es una función que viene por defecto activa, y que reduce el consumo energético cuando se detecta video en movimiento, y no solo eso, los contenidos utilizados por la comisión internacional de electrodomésticos, fueron escogidos para simular de la mejor manera las imágenes promedio vistas internacionalmente por los usuarios”.
Los resultados aun no publicados por el grupo independiente denominado ComplianTV, los cuales alegan tener pruebas de un mayor consumo eléctrico de los distintos modelos de televisores de Samsung en condiciones de uso cotidiano y una reducción significativa de los mismos cuando se aplican las pruebas oficiales de la comisión internacional de electrodomésticos, serían la prueba reina de la presunta trampa en la que Samsung estaría involucrado.
Este es definitivamente un capítulo que aun no se ha cerrado y que seguramente va a abrir las puertas para investidas un rango mucho más amplio de compañías y la forma como las mismas abordan las pruebas oficiales de los entes de control.