Durante la última edición del CES, que se celebró en Las Vegas a principios del pasado mes de enero, Sony nos sorprendió con un anuncio inesperado: ya tenía a punto el Vision-S, su primer coche eléctrico. Para llevar a buen puerto este proyecto la marca japonesa se ha aliado con otras compañías, entre las que destacan Magna, NVIDIA, Continental, Bosch o Qualcomm, en un claro intento de meterse en el negocio no solo del coche eléctrico, sino también del coche autónomo.
Kenichiro Yoshida, CEO de Sony, explicó durante su presentación en el CES que por el momento Vision-S es un prototipo que, eso sí, está cargado de tecnología desarrollada por Sony. Tiene nada menos que 33 sensores diferentes ideados para desarrollar su potencial como coche autónomo; una amplia pantalla panorámica que recoge la información del vehículo y nos permite acceder a los ajustes, las cámaras o el navegador; y un equipo de sonido al que Sony llama 360 Reality Audio y que nos promete una capacidad de inmersión inédita, ciñéndonos a lo que dice la propia Sony.
Kenichiro Yoshida, CEO de Sony, explicó durante su presentación en el CES que Vision-S es un prototipo que, eso sí, está cargado de tecnología desarrollada por Sony
El habitáculo de un coche tiene unas características acústicas poco propicias para la reproducción del sonido con cierta calidad, pero será interesante comprobar cómo rinde esta tecnología de Sony si en algún momento se presenta la oportunidad de probar este vehículo. Y es que, y esta es la auténtica noticia, la central nipona de la compañía ha confirmado que va a comenzar a probar este prototipo de coche eléctrico en carreteras públicas, un paso hacia delante importante que nos invita a pensar que quizá el recorrido de este proyecto sea más ambicioso de lo que pensamos cuando descubrimos este coche durante el CES.
Ya es lo suficientemente avanzado para que pueda ser probado en carreteras públicas
La forma en que Yoshida presentó este coche y el hecho de que Sony se ha aliado con un abanico variopinto de compañías para hacer posible este prototipo parecían reflejar que el propósito de Vision-S no es otro que demostrar el potencial que tienen algunas de las tecnologías desarrolladas por Sony aplicadas a los coches eléctricos y autónomos. No cabe duda de que es una estrategia que puede funcionar muy bien si lo que pretende esta compañía es participar en un mercado con el evidente potencial que tiene el del coche eléctrico.
Es probable que esto no haya cambiado, y que, efectivamente, el papel de Vision-S sea exactamente este. En este contexto las pruebas en carretera que acaba de anunciar Sony pueden representar, precisamente, el bautismo de fuego que esta marca necesita para demostrar a los fabricantes de coches eléctricos y autónomos que su tecnología funciona. Pero también cabe otra posibilidad que no podemos descartar, y que de prosperar podría depararnos más sorpresas interesantes: quizá estas primeras pruebas en carretera tienen el objetivo de demostrar la viabilidad en un escenario de uso real no solo de las tecnologías que Sony ha implementado en este coche, sino también del Vision-S como un prototipo completamente funcional.
Es muy poco probable que Sony esté pensando en embarcarse en este mercado, que le es relativamente ajeno, ella sola, pero no debemos olvidar que este prototipo es fruto del trabajo conjunto con empresas que sí tienen un evidente peso específico en el sector de la automoción, como Magna, Bosch o Continental. Por esta razón no parece descabellado contemplar la posibilidad de que el proyecto que ha hecho posible el Vision-S persiga que a medio plazo aparezca un nuevo actor en el sector de la automoción participado por estas marcas. Por el momento no nos queda más remedio que conformarnos con la información oficial que ha dado a conocer Sony: su coche eléctrico circulará por las carreteras japonesas durante el actual año fiscal.
Más información | Sony