Este martes, un tribunal moscovita sentenció a Alberto Enrique Giraldo Saray, un ciudadano colombiano, a cinco años y dos meses de prisión tras hallarlo culpable de "difundir mentiras" sobre las acciones militares rusas en el conflicto con Ucrania.
Según la agencia rusa RIA Novosti, la condena a Giraldo Saray es la primera bajo la nueva legislación contra las noticias falsas, con la que Rusia endureció los castigos por la difusión de información contraria a su narrativa oficial. La pena impuesta incluye "privación de libertad en una cárcel de régimen común" por un plazo no menor a 62 meses.
Giraldo Saray, un cucuteño de 41 años que vive en Rusia desde 1999, fue arrestado en abril de 2022, acusado de propagar información falsa acerca de las acciones militares rusas en territorio ucraniano. Según sus redes sociales, Giraldo estudió Ciencias Politicas en la Universidad Rusa de la Amistad de los Pueblos (RUDN) y ha trabajado, principalmente, en el sector turístico.
Las autoridades rusas, en cambio, dicen que trabajaba para Digital Humanity, una ONG a la que acusa de tener lazos con la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), entidad que ha estado prohibida en Rusia desde 2012.
'Preso político'
La asociación con un organismo de EEUU ha añadido otra capa de controversia al caso, dada la tensa relación entre Estados Unidos y Rusia. El gobierno colombiano, por ahora, no se ha pronunciado sobre la condena.
La acusación rusa alega que, en marzo de 2022, Giraldo Saray instaló varios teléfonos móviles conectados a fuentes externas de energía en un centro comercial de Moscú con el objetivo de enviar de forma masiva y remota mensajes que contenían información falsa sobre las acciones de las Fuerzas Armadas rusas en Ucrania.
En un registro realizado en la residencia del hoy condenado, las fuerzas de seguridad confiscaron varios objetos y documentos que se presentaron como pruebas en el caso, incluyendo un pasaporte ruso con visa estadounidense vigente.
El proyecto de derechos humanos 'Memorial' ha indicado que, basado en estándares internacionales, considera a Giraldo Saray un preso político. En un pronunciamiento, indicó: "Se abrió una causa penal contra él por enviar mensajes sobre los asesinatos de civiles ucranianos a manos de soldados rusos. Alberto Giraldo está siendo procesado por ejercer el derecho a la libertad de expresión y con el fin de intimidar en Rusia a todos los opositores a la guerra contra Ucrania".