Cuando sale un buque insignia que nos deja buen sabor de boca con las cámaras automáticamente nos pasa por la cabeza una idea: ¿cómo queda frente a sus rivales más directos? De ahí que tras probar lo último de Huawei hayamos querido realizar una comparativa fotográfica entre el Huawei P20 Pro y el Pixel 2 XL.
Un combate que se plantea cuanto menos curioso teniendo en cuenta el número de cámaras que enfrenta cada uno: por una parte tenemos la triple cámara del Huawei P20 Pro mientras que al otro lado del ring le espera el Pixel 2 XL con una sola óptica. No obstante, en la última comparativa fotográfica de los principales smartphones del mercado vimos que a veces menos es más, con lo que pese a ser móviles de generaciones distintas enfrentarlos es algo interesante sin ninguna duda. Veamos qué tal el duelo.
Especificaciones de las cámaras traseras
Huawei P20 Pro | Pixel 2 XL | |
---|---|---|
Resolución sensor | 40 megapíxeles RGB + 20 megapíxeles monocromo + 8 megapíxeles teleobjetivo | 12 megapíxeles |
Tamaño sensor | 1/1,7 pulgadas (RGB) | 1/2,6 pulgadas |
Apertura | f/1.8 (RGB), f/1.6 (monocromo) y f/2.4 (tele) | f/1.8 |
Estabilización óptica | Sí (tele) | Sí |
Modo retrato/desenfoque | Modo retrato y Modo apertura | Modo desenfoque selectivo |
Especificaciones de las cámaras frontales
Huawei P20 Pro | Pixel 2 XL | |
---|---|---|
Resolución sensor | 24 megapíxeles | 8 megapíxeles |
Tamaño sensor | -- | 1/3.2" |
Apertura | f/2.0 | f/2.4 (25 mm) |
Herramientas de belleza | Sí | Sí |
Modo retrato/desenfoque | Sí (Retrato sólo, no apertura) | Sí |
Un repaso a las apps de cámara
Uno de los aspectos más interesantes de enfrentar a los buques insignia de Huawei y Google es la parte del software, más allá de las bondades de sendas ópticas. Ya lo recordamos en la última comparativa de los principales móviles del momento viendo al pasearnos por las apps que había un grupo de software muy básico mientras había otro cargado de múltiples opciones.
No vamos a ahondar en si esto es bueno o malo ya que en parte es algo subjetivo, pero en este duelo vamos a ver precisamente un representante de cada uno de estos grupos. El Pixel 2 XL mantiene la esencia de la app de cámara, lo más sencillo, con el obturador a un lado (acompañado del acceso a la galería, al vídeo y a la otra cámara) y con los accesos rápidos típicos (ajustes, temporizador, HDR, flash), si bien también vemos otros menos habituales como el balance de blancos o la detección de movimiento.
Seguimos echando en falta un modo manual, pero sí dispone de modo retrato (tanto para trasera como frontal) y mantiene algunas opciones características de la app genuina de Android como Photo Sphere, habiéndose añadido las pegatinas de realidad aumentada. Es muy sencilla e intuitiva, y salvo lo de los ajustes manuales poco reproche tiene.
El Huawei P20 Pro, por el otro lado, representa a esas apps que vienen salpimentadas con gran cantidad de añadidos y opciones, si bien cabe resaltar algunos aspectos en este sentido. Al tener tres cámaras con tres funciones características (y las que dan sus cooperaciones entre ellas y con la NPU del Kirin 970), tiene sentido que encontremos accesos o pestañas específicas para las mismas como el modo noche o el acceso al modo monocromo.
Eso sí. Ya lo dijimos en el análisis y lo matizamos aquí: la navegación no es la mejor, y tendría mucho más sentido que el modo monocromo tuviese su pestaña como la tiene el modo retrato o el profesional. O que el HDR tuviese el acceso rápido que suele tener en la app de cámara (salvando el caso también de Samsung).
Dejando las mejoras a parte, los teléfonos Huawei disponen de modo retrato y modo apertura, dos maneras de obtener un desenfoque mayor que el que se consigue con los modos automático y manual tanto en fotografías macro como en primeros planos. Además, si optamos por el disparo en manual podremos conservar el archivo RAW para editarlo a nuestro gusto si no nos gusta el procesado automático.
Las bases de la comparativa
Así, viendo lo que en este caso vemos que ofrece cada app y cada cámara, hemos hecho pruebas teniendo en cuenta lo distintos tipos de escena que se pueden presentar y qué da de sí cada cámara en cuanto a los modos y posibilidades. Compararemos siempre la opción automática, comentando en cada caso el HDR al ser algo que ambos pueden aplicar (aunque de distinta manera) y si hay alguna particularidad extra (como pueden ser el modo manual o el nocturno del Pro).
Las fotografías están hechas siempre con la máxima resolución de la que se dispone en cada caso. También veremos un tú a tú entre bokeh o desenfoque, viendo cómo se comportan los modos específicos con los que cada smartphone cuenta y si hay alguna situación que se les resista.
Fotografías en exteriores con luz abundante y media
Las escenas en las que las cámaras suelen estar más cómodas y rendir mejor son aquellas en las que la luz abunda y la fuente de la misma se sitúa de manera indirecta. Para ver qué tal se portan aquí estos dos smartphones hemos hecho fotografías de distintos tipos y jugando con la iluminación y los planos de varias maneras.
En un disparo en plano general con buena luz vemos que el Huawei P20 Pro aplica algo más de saturación, un poco por encima pero acercando el grado de viveza algo más a la realidad. Comentar aquí que el disparo con el P20 Pro es el resultante sin tirar del procesado "inteligente" que el smartphone aplica tras identificar la escena, el cual en general nos parece más postizo como comentamos en el análisis al dar siempre unas imágenes demasiado saturadas, contrastadas y dramáticas (y por tanto alejadas de un resultado realista).
En cuanto al detalle el Pixel 2 XL resuelve mejor al no tirar del resalte de bordes que solemos ver en los planos del fondo, cosa que sí vemos en el Huawei P20 Pro. En este sentido el HDR no tiene este efecto, acercándose más a lo que vemos en el modo manual en cuanto a los fondos y segundos planos (pero prácticamente sin cambios en exposición y rango dinámico con respecto al modo automático). Los HDR del Pixel 2 XL quedan algo subexpuestos con respecto al automático, pero dando un resultado equilibrado.
Si atendemos precisamente al detalle en segundos planos, vemos que con el Pixel 2 XL se diferencia bastantes sobre todo tirando de HDRplus. Aquí el disparo múltiple favorece la definición en segundos planos salvando bastante mejor los cielos que el alto rango dinámico del P20 Pro.
Pasando a ver qué tal resuelven primeros planos y macros (en modo automático y HDR, sin tirar de modos retrato o de desenfoque forzado) tenemos un disparo con mayor definición en el caso del Pixel 2 XL, sobre todo tirando de HDRPlus. Eso sí, también son algo más cálidos, lo cual per se no deja ni mucho menos un mal disparo pero se aleja un poco de la realidad (aunque podemos cambiar el balance de blancos en el disparo).
Es cuando la iluminación escasea donde el HDR puede ser un aliado a la hora de salvar los fondos. Los enfoques automáticos aquí se hacen de rogar, aunque sin encontrar en este sentido mucha diferencia y en general se mantienen rápidos y eficientes en ambos móviles, pero a nivel de la claridad y nitidez el Pixel 2 XL sale también algo mejor parado en este caso.
Con luz favorable los colores son más realistas en el Pixel 2 XL, sin ese exceso de calidez que veíamos con una escena con contraste de iluminación y sombras. A nivel de detalle están muy igualados, y como ocurría antes con el Pixel y el balance de blancos en este caso la dosis extra de saturación del P20 Pro es equilibrada y, aunque se aleja de la realidad, no deja tampoco un mal resultado.
Con poca luz y un plano general el Pixel compensa mejor la exposición en disparo automático y no peca de resalte de bordes en si optamos por uno de los HDR (mejor el estándar que el mejorado, dado que éste segundo tiende a subexponer). Más igualados si hay un objeto en primer plano, aunque el Pixel 2 XL resuelve mejor a nivel de detalle.
¿Y el zoom?
Puede que lo que más nos sorprendiese del Huawei P20 Pro es ese espectacular zoom que han logrado gracias a la fusión del zoom híbrido con el óptico, haciendo que el detalle se mantenga de manera notable incluso a 5x. Lo vimos bien en el análisis, pero una comparativa es otra buena ocasión para ver la calidad de este zoom y si realmente queda por encima de sus rivales.
En el caso del Pixel 2 XL al menos es así. El móvil de Google no tiene un mal zoom para tener una (sola) lente que no es teleobjetivo, pero la superioridad del P20 Pro (que sí dispone de un tele entre sus tres objetivos) queda clara, incluso con disparos a contraluz.
Fotografías en interiores
En estas situaciones las cámaras empiezan a vérselas con un reto mayor, siendo habitual que empecemos a ver pérdida de detalle y/o una mayor cantidad de ruido al tirar de ISO más altas. Lo que veremos aquí es que para compensar en ambos casos las cámaras proceden de manera similar: subexponen ligeramente si la luz es abundante y sobreexponen si ocurre justamente lo contrario, pero a nivel de detalle están bastante igualadas.
Vemos también un matiz más cálido en el caso del Pixel, si bien en este caso se acerca más a la imagen control con la cámara y la escena realmente tenía unos blancos más cálidos. Los HDR del Pixel aquí subexponían dejando imágenes más oscuras y alejadas de la exposición real, siendo el HDR del P20 Pro más equilibrado y acertado a nivel de nitidez.
Los disparos en HDR sí compensarán si tenemos un primer plano o una macro a contraluz. Aquí está la cosa más reñida; en automático tenemos una ligera sobreexposición en el Huawei P20 Pro contra la ligera subexposición del Pixel 2 XL, pero en HDR el tú a tú está más igualado resolviendo mejor el Pixel 2 XL a nivel de detalle, aunque con un contraste más marcado (y por tanto un resultados algo más dramático, pero sin excesos).
Si lo ponemos algo más difícil las diferencias se acentúan, y son los modos complementarios los que pueden ayudar a mejorar el resultado. El disparo suele ser además más lento, cosa que requiere más trabajo a la cámara y más paciencia al usuario, de modo que pueden aparecer instantáneas movidas.
Lo que vemos en un disparo con muy poca luz y en modo automático es, precisamente, parte de las fotografías movidas en el caso del P20 Pro (que de hecho siempre nos indicará que no movamos el teléfono una vez hemos pulsado el obturador) o con un nivel de ruido alto en el caso del Pixel 2 XL. Los HDR aquí van a aportar una dosis extra de detalle, con la aparición estelar del modo noche del P20 Pro cuya estabilización por inteligencia artificial ya ayuda sin que sea específicamente un disparo nocturno.
Yendo a los metadatos de las fotografías vemos que el Pixel 2 XL tira a ISO 4800 en caso del disparo en automático (de esta escena), reduciendo a ISO 3193 e ISO 2109 para el HDRplus y el HDRplus mejorado respectivamente, de ahí que en el primer caso el ruido esté más presente. No obstante, tampoco es que el P20 Pro sea más restrictivo en este sentido sino todo lo contrario, tirando a ISO 6400 e ISO 5000 para los modos automático y HDR respectivamente, sin que veamos un ruido tan evidente como en el automático del Pixel. El modo noche en automático sí reduce algo más tirando con ISO 2500.
¿Qué pasa si además de reducir luz ponemos un objeto en primer plano? Que además de tener que ayudar al enfoque automático para que la toma de luz sea la correcta podemos ver quién rinde mejor a nivel de detalle. Ambos sobreexponen ligeramente para compensar la baja iluminación, pero de nuevo es el Pixel 2 XL el que peca de exceso de ruido.
Los HDR ayudan a reducir ruido y a definir un poco más los contornos, viendo que en el Pixel 2 XL quizás el procesado automático mezcla los disparos hasta tener un mayor grado de contraste para ayudar en esta definición y dejando una exposición más cercana a la realidad que el HDR del P20 Pro (más lavado). Pero el que sorprende por nitidez es de nuevo el modo noche del P20 Pro (aunque los blancos quedan algo fríos).
Fotografía nocturna
Tras el escenario anterior es la marcha del sol la que pondrá en la cuerda floja a cualquier cámara. El reto aquí es sacar una fotografía ya no sólo fiel a la realidad, también evitar que salga una instantánea movida y compensar en la medida de lo posible los ajustes para que la inevitable pérdida de nitidez no se coma todo el detalle tanto del primer plano como del fondo, así como la presencia de ruido.
¿Cómo afrontan todas estas exigencias los modos automáticos? Lo que vemos es que si la iluminación es abundante ambos defienden el resultado bastante bien, viendo que el P20 Pro expone menos de manera que se definen mejor las zonas donde hay focos de luz sin que quede un disparo subexpuesto.
Cuando la luz es inferior se acentúan las diferencias en el resultado. El enfoque automático y la toma de luz del Pixel 2 XL funcionan mejor y en el P20 Pro obtenemos instantáneas muy subexpuestas. En ambos casos el HDR va a ayudar a compensar la exposición, pero resuelve mejor el P20 Pro al ajustar algo más la ISO (sacrificando iluminación, pero reduciendo ruido) y definiendo bastante más, también el modo noche (que compensa por la estabilización sin trípode para disparos más largos y por tanto más expuestos).
El HDRplus será de hecho un buen aliado para el disparo nocturno con el Pixel XL 2. Cuando la iluminación es intermedia el resultado es notablemente mejor que con el modo automático, aunque tanto con HDRplus como con el mejorado siempre sacará más ruido que el Huawei P20 Pro incluso tirando con ISO menores.
Si nos vamos a planos menos generales, con luz escasa es de nuevo el modo noche del Huawei P20 Pro el que resuelve mejor. Los modos automáticos definen menos que los disparos en HDR, viendo de nuevo más ruido en general con el Pixel 2 XL (y un balance de blancos algo cálido) en cualquiera de las opciones.
Con mejor iluminación y un primer plano el P20 Pro vuelve a resolver mejor en automático por la corrección del ruido y el detalle. En HDR el nivel de detalle se pone a un nivel más igualado, pero el del Pixel define mejor, aunque eso sí tirando de contraste algo exagerado (frente a unos colores algo lavados en el del P20 Pro).
Modos de desenfoque
En este caso ambos móviles cuentan con un modo retrato como tal, aunque el Huawei P20 Pro tiene además un modo apertura que permite forzar hasta valores simulados más allá que las que permitiría la cámara por sus componentes. De este modo, el P20 Pro tiene una alternativa más si por alguna circunstancia el modo retrato no se activa, además de contar con temporizador para estos disparos (lo cual no es posible en el Pixel 2 XL).
Con iluminación abundante y favorable y sin elementos que suelen suponer una dificultad añadida (poco contraste del elemento principal con el fondo, superficies finas como el pelo, etc.) el resultado es similar, con un enfoque automático que actúa bien y rápido y salvando bien el elemento principal, aunque el P20 Pro añade un plus de saturación que da unos colores más vivos pero menos realistas.
¿Qué ocurre si les buscamos las cosquillas añadiendo elementos como el viento o los contraluces? Que ambos defienden bastante bien a nivel de enfoque e identifican bien el elemento principal aunque se mueva y tenga un contorno complicado, pero el Pixel 2 XL resuelve mejor a nivel de colores y exposición.
Cuando baja la luz y el objeto si se sitúa algo más lejos es el modo retrato del Huawei P20 pro el que no se activa siempre, teniendo la opción de recurrir al de apertura que es menos exigente y que siempre aplicará un desenfoque. Pero la precisión de éste segundo es mucho menor, dando borrones e inconsistencias, siendo el desempeño del Pixel 2 XL mejor.
Si lo complicamos mucho el único que hace "milagros" es el modo apertura del Huawei P20 Pro. Los modos retrato no se activan si el objeto está muy cerca y/o hay poca distancia con el fondo, y el modo apertura salva bastante bien la situación (siempre perdiendo algo de naturalidad).
¿Podemos hacernos autorretratos con este modo? Aquí es clave que el enfoque automático trabaje bien dado que no va a estar nuestro dedo corrector para indicarle cuál es el objeto principal en la fotografía. Ventaja aquí para el P20 Pro por el temporizador, ya que podemos colocarlo en un trípode facilitando el disparo.
Aunque no es esto lo que más nos limita con el Pixel 2 XL, sino la ampliación que por defecto hace el software al activar dicho modo. A una misma distancia el encuadre será de un área menor, lo cual a veces nos puede jugar una mala pasada (como en un contraluz), si bien esto es una ventaja a nivel de sacar detalle y muestra que el modo es capaz de activarse con una cercanía mayor que los de otros teléfonos, más restrictivos (que exigen mínimos de 1,5 y 2 metros, como en el caso del iPhone).
Así, lo que vemos con estas pruebas es que el modo retrato del Pixel 2 XL es capaz de actuar y resolver bien a nivel de detalle incluso a distancias menores de un metro (y ampliando), identificando bien el sujeto y enfocándolo correctamente. Eso sí, de noche el ruido vuelve a estar presente como no lo vemos en el P20 Pro, el cual eso sí salva menos el detalle.
A colación de estos efectos es interesante ver cuál permite acercarnos más cuando hacemos una macro, ya sea con la intención de sacarle jugo al desenfoque de lente o alguno de los modos que hemos visto. La diferencia es muy poca en cuanto a la distancia mínima de enfoque, pero es el Pixel el que permite acercarnos un poco más.
Y el ganador es...
Éste puede que sea uno de los combates más reñidos que hemos tenido en nuestro ring teniendo en cuenta el nivel espectacular al que han llegado las cámaras de los smartphones y que se trata de dos terminales de última generación. Lo interesante, no obstante, es casi el aspecto numérico: estamos comparando tres cámaras con una sola, aunque ya vimos que la cantidad no lo es todo siempre.
Lo que hemos ido viendo en esta comparativa es que los fuertes están bien repartidos, tanto que casi hay un empate si valoramos cada apartado y sumamos pequeñas victorias:
- El Pixel 2 XL resolvía mejor de día y en interiores bien iluminados, también a nivel de desenfoque y detalle tanto en estas situaciones como en el modo retrato.
- El Huawei P20 Pro logra mejor resultado en fotografía nocturna e interiores poco iluminados, con un modo retrato más exigente pero compensando con el modo apertura, que siempre actúa (aunque no lo haga el retrato).
Teniendo en cuenta que el P20 Pro tiene probablemente el mejor zoom que existe actualmente en el mercado y que queda mejor de noche, la situación más exigente a nivel de rendimiento fotográfico, quizás lo justo sea colocar los laureles al Huawei P20 Pro seguido de muy cerca del Pixel 2 XL. La diferencia, reiteramos, es poca y a la hora de elegir podrá compensarnos más uno u otro según qué fotografía sea la que hagamos con más frecuencia y qué móvil la resuelva más a nuestro gusto.
Algo muy interesante que de nuevo sacamos de esta comparativa es lo que ya comentábamos antes: la mejor experiencia fotográfica ni el mejor rendimiento lo hacen disponer de más cantidad de elementos (ya sea software o hardware), sino su aplicación en su correcta medida y que al final el usuario pueda lograr el mejor resultado sin tener que poner medios extra o disponer de un mayor conocimiento (o paciencia). Ahí son claves modos como el HDRplus o el modo noche, los cuales no implican nada más que su elección para mejorar ciertos disparos (aunque el modo noche sí tiene rango de ajuste con la ISO y la velocidad de obturación).
Otro aspecto de interés de cara al futuro es qué hará Google con su próximo smartphone a nivel de cámaras. Sony por fin se ha subido al tren de la doble cámara y hemos de tener en cuenta que, aunque hemos comparado dos smartphones de última generación el Pixel pertenece aún a la anterior, y para este año toca renovación. ¿Logrará El P20 Pro conservar la medalla de oro? Esperamos poderlo comprobar en unos meses.