BYD en Colombia continúa consolidándose, en 2024 la marca alcanzó un récord en ventas de vehículos de nuevas energías (NEV), con un total de 4.590 unidades y una participación de mercado del 2,3%.
Desde su llegada al país en 2020, de la mano de Motorysa, BYD ha experimentado un crecimiento exponencial. En 2024, la marca registró un aumento del 218% en comparación con el año anterior, sin incluir los buses de Transmilenio y del SITP.
En el segmento de vehículos completamente eléctricos, BYD puso en circulación 3.901 nuevas unidades, y logró una participación de mercado del 43% y un crecimiento del 446% en su operación respecto a 2023.

La movilidad eléctrica es ya una realidad en Colombia, y la estrategia de BYD se enfoca en seguir fortaleciendo su presencia en este segmento. “Cada vez que haya una oportunidad, la vamos a explotar. Ya tenemos un portafolio de más de diez modelos, cinco de ellos lanzados el año pasado. Ahora nuestro enfoque es posicionar estos modelos y lograr las ventas esperadas en cada segmento”, señaló un Nicolas Behar, Gerente de BYD Auto.
Infraestructura de carga
Uno de los desafíos para la movilidad eléctrica en Colombia sigue siendo la infraestructura de carga, especialmente en conjuntos residenciales. La marca busca educar y acompañar a los clientes en este proceso.
“Hoy en día, en los sótanos de los edificios ya existen tuberías que permiten la instalación de cargadores. Nos conectamos al contador del usuario, utilizamos la infraestructura existente y garantizamos la seguridad de la instalación”, explicó Nicolás Behar.
Además, la compañía anunció la creación de una nueva división de energía que ofrecerá soluciones inteligentes de carga. Un dispositivo permitirá gestionar la capacidad de carga del hogar, lo que permitirá asegurar que el consumo total nunca supere lo contratado con la empresa de energía.
Esto eliminará preocupaciones sobre sobrecargas en edificios y facilitará la adopción de vehículos eléctricos.
Perspectivas de crecimiento
El panorama para la movilidad eléctrica en Colombia sigue siendo prometedor. Con más marcas introduciendo productos eléctricos y un entorno fiscal favorable, BYD anticipa un año de crecimiento sostenido.
“Colombia es un país ideal para esta transición. Los vehículos eléctricos solo pagan un 5% de IVA, mientras que los de gasolina pueden llegar a tributar hasta un 35% en aranceles, 8% en impuesto al consumo y 19% de IVA”, señaló Nicolas Behar.
Si las políticas públicas continúan favoreciendo la movilidad sostenible, con incentivos como la exención de restricciones vehiculares, las ventas de eléctricos seguirán en aumento.
¿Habrá una planta de BYD en Colombia?
Marco Pastrana, Gerente General de Motorysa, importador y representante de BYD en Colombia, indicó que los planes para la planta están definidos desde hace dos años, incluyendo la ubicación. Sin embargo, mencionó que el tema de los aranceles es clave para la viabilidad del proyecto.
"Si vamos a ensamblar un híbrido en Colombia y pago un arancel de ensamble local que, después de cinco años, es del 15%, me queda mejor importarlo de China", explicó Pastrana.
Sin embargo, Pastrana también enfatizó la falta de garantías a largo plazo: "Cinco años adelante no hay ninguna garantía para una planta en Colombia. Las plantas en Colombia no son rentables porque les cambian las reglas de juego".
En ese sentido, el proyecto aunque es real, necesita bases sólidas para materializarse. Mesa explicó que, aunque se han mantenido conversaciones con el Gobierno, la decisión depende en parte de las condiciones impuestas por el Gobierno sobre el incremento de aranceles.
Con estos elementos sobre la mesa, la decisión de instalar una planta en Colombia dependerá de la estabilidad de las políticas arancelarias y de la capacidad del mercado colombiano para absorber una producción suficiente. Mientras tanto, BYD continuará evaluando la situación y manteniendo conversaciones con el Gobierno, a la espera de un marco regulatorio que haga viable la inversión.
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