Hace unos meses un avión gigante que parecía una singular evolución de los antiguos dirigibles prometía transformar el tráfico y transporte aéreo. El Airlander 10 es capaz de transportar 10 toneladas, y sus creadores querían ir incluso más allá con el Airlander 50, una versión cinco veces más grande.
Aquel proyecto tuvo no obstante un tropiezo importante. Una semana después de su primer vuelo el Airlander 10 se estrellaba en un vuelo posterior, algo que condicionaba su futura viabilidad. Los responsables del Airlander 10 dicen que ya han detectado y corregido el problema, y aseguran que esta enorme aeronave está lista para volar de nuevo.
Preparados para levantar el vuelo de nuevo
En un comunicado reciente la empresa Hybrid Air Vehicles indica que "todas las reparaciones estructurales están completas", y también destacan que "han entendido completamente" las causas de aquel accidente que afortunadamente no causó heridos graves ni muertos.
La empresa, eso sí, no ha explicado cuáles fueron las causas de que el Airlander 10 se estrellase de esa forma, y tras aplicar cambios en los "procedimientos y el entrenamiento" están preparados para "reiniciar el programa de vuelos de prueba pronto".
Estos vehículos destacan no solo por su tamaño, sino por el poco ruido y poca contaminación que generan durante sus vuelos. Entre sus ventajas está además la capacidad de aterrizar y despegar en distancias cortas y en emplazamientos complejos (como el desierto o zonas heladas), y puede mantenerse en vuelo durante cinco días, aunque eso sí, su velocidad máxima es de tan solo 150 km/h.
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