Debido a la severa crisis de abastecimiento de agua que atraviesa Bogotá por el tiempo seco prolongado y la falta de lluvias, el alcalde Carlos Fernando Galán anunció un nuevo paquete de medidas estrictas para ahorrar y reutilizar agua en la ciudad. Entre estas, se incluyen la actividades que requieren el uso intensivo de agua potable, como el lavado de vehículos.
"Hemos preparado una serie de medidas que van a regir a partir del 29 de septiembre y que estamos también abiertos a complementar con medidas, que estamos recogiendo de expertos, estamos recogiendo también de la ciudadanía" advirtió Galán que informó que se va a expedir un "decreto que incorporará elementos como prohibiciones, por ejemplo, la prohibición del uso de agua potable para lavado de fachadas, parqueaderos, vehículos, el riego de jardines, por ejemplo".
El alcalde fue enfático al advertir "que todo eso no se puede regar con agua potable del sistema, queda prohibido", mientras que aclaro que los "tanques ornamentales con agua del sistema potable no se podrán llenar estas actividades solamente se van a poder hacer con agua reciclada o agua lluvia".
Qué pasará con los lavaderos de carros
Según las declaraciones de Galán desde el próximo 29 de septiembre las empresas de lavado de vehículos no podrán utilizar agua potable directamente del sistema de acueducto.
Sin embargo, esto no significa que los lavaderos de carros deban cerrar sus operaciones por completo y las alternativas sugeridas para este tipo de negocios incluyen:
- Reutilización de agua reciclada: Los lavaderos podrán continuar sus operaciones si implementan sistemas de reciclaje de agua que permitan reutilizar el agua de lavados anteriores. Esto es clave para cumplir con las nuevas regulaciones.
- Uso de agua de lluvia: Los establecimientos también pueden optar por recolectar y almacenar agua de lluvia para utilizarla en el lavado de vehículos, siempre y cuando esta sea tratada adecuadamente.
Aunque aún falta la expedición del decreto por parte de la alcaldía, ya se dejó en claro que el incumplimiento de estas nuevas normas puede conllevar sanciones. De hecho, la autoridades locales, incluyendo la Policía, estarán vigilando que se acaten las restricciones.
Galán también fue vehemente con este tema al declarar que "vamos a imponer sanciones que podrán ir desde amonestaciones, dependiendo del caso, multas o inclusive órdenes de suspensión de actividades a quienes violen las normas",
El alcalde subrayó la importancia de generar conciencia colectiva sobre el ahorro del agua e incluso se realizarán jornadas educativas en colegios y comunidades para sensibilizar a los ciudadanos, especialmente a los más jóvenes, sobre la necesidad de proteger los recursos hídricos de la ciudad.
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