Los accesorios de drones de bajo costo que se venden en línea podrían convertir los drones comerciales cotidianos en armas de destrucción masiva, advierten los expertos.
Una investigación realizada por la empresa de ciberseguridad Red Balloon identificó nuevos desarrollos alarmantes en la disponibilidad de complementos, que van desde accesorios para carga hasta módulos impulsados por IA y cables de fibra óptica de largo alcance.
En teoría, esta clase de accesorios podría permitir a cualquiera, de delincuentes a grupos extremistas, eludir los controles de las autoridades y convertir drones comunes en armas.
Los hallazgos de Red Balloon provienen de plataformas de compras como AliExpress y Temu, donde encontraron productos que pueden transformar los drones convencionales en sistemas altamente avanzados capaces de identificar objetivos y volar largas distancias sin interrumpir la señal.
Tecnología de guerra
Los accesorios son inquietantemente similares a la tecnología utilizada en la guerra entre Rusia y Ucrania para lanzar explosivos o estrellar drones contra objetivos de forma autónoma. Lo que una vez fue tecnología de campo de batalla ahora se vende abiertamente en línea por precios tan bajos como 200 dólares, accesible para cualquiera con una tarjeta de crédito.
"Esta tecnología no existía comercialmente hace dos años, pero ahora los fabricantes la están fabricando para la guerra, y se está extendiendo", dijo Ang Cui, director ejecutivo de Red Balloon. Para ilustrar su punto, la empresa compró drones de largo alcance, cables de fibra óptica de hasta 10 km de largo y módulos de guía de inteligencia artificial.
Tan solo uno de estos artículos -la fibra óptica- hace posible volar drones sin que sean susceptibles a los bloqueadores de señal que constituyen una herramienta habitual de seguridad antidrones.
A los investigadores de Red Balloon les preocupa que los componentes, vendidos a bajo precio y a granel, tengan el potencial de empoderar a actores peligrosos.
Los expertos también destacan que estos accesorios están construidos con chips reprogramables cada vez más sofisticados, lo que podría permitir una mayor personalización, mejorando su potencial de armamento.
La combinación de drones baratos y tecnología fácil de usar plantea una creciente amenaza a la seguridad, especialmente en entornos urbanos densamente poblados donde las contramedidas como las ametralladoras y los inhibidores no se pueden usar de manera efectiva.
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