Los intentos por ganar terreno en el segmento de la realidad virtual son numerosos, y a los dos principales contendientes en la gama alta -Oculus Rift y HTC Vive- se le suman competidores con menos ambición pero con propuestas llamativas.
Uno de los últimos en intentarlo es el fabricante chino Pico, que quiere lanzar al mercado su propia propuesta, llamada Pico VR. Lo singular de estas gafas de realidad virtual es que ni necesitaremos un móvil para acoplarlo a ellas, ni un PC que ofrezca toda la potencia necesaria para esas experiencias. El secreto de todo está en su mando, con un diseño que recuerda mucho a las líneas que probablemente usaría Nintendo.
Un mando que es más de lo que parece
Ese mando de control con un diseño exterior extredamente simplista encierra en su interior un pequeño pero potente miniPC. En él encontramos un procesador Qualcomm Snapdragon 820, 4 GB de RAM, 32 GB de capacidad de almacenamiento -con una ranura microSD- y está basado en una versión de Android especialmente adaptada a este dispositivo.
El mando tiene los controles convencionales de este tipo de periféricos, pero además cuenta con un touchpad y sensores de movimiento que trabajan con un par de cámaras de seguimiento externas -similares a las del HTC Vive- que permiten que la experiencia de inmersión en esos contenidos de realidad virtual sea óptima.
Las gafas trabajan en conjunción con ese mando y nos ofrecen dos pantallas de 1.200 x 1.080 píxeles, una tasa de refresco de 90 Hz y un ángulo de visión de 102 grados. Su peso, de 320 gramos, las hace cómodas y ligeras para todo tipo de ámbitos. Se espera que este producto esté disponible en junio por un precio que rondará los 550 dólares, pero Pico también ofrece otra opción: comprar únicamente las gafas por 300 dólares y usarlas conectadas a un PC.
Vía | The Verge Más información | Pico VR