Samsung está en el ojo del huracán luego de que cientos de usuarios reportaran a través de redes sociales que sus teléfonos móviles, pertenecientes a la línea Note 7, se explotaron causando diferentes daños materiales en varios países del mundo. Sin embargo, los problemas para la compañía surcoreana no parecen acabar.
Recientemente se informó que las nuevas baterías que fueron instaladas en los Note 7 tienen problemas y que en algunas ocasiones también explotan. Ahora, solo días después de este informe, se conoció que Samsung está en 'discusiones activas' con funcionarios de los Estados Unidos porque sus lavadoras también explotan.
Un problema que Samsung quiere ocultar
En el comunicado presentado por la compañía se afirma que se está trabajando con la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de EE.UU para solucionar estos 'posibles casos' de explosión a la hora de lavar artículos voluminosos. Samsung también afirmó que estos problemas se han presentado en algunas lavadoras fabricadas entre 2011 y 2016.
En agosto, tres consumidores presentaron una demanda en contra de Samsung, alegando que sus lavadoras explotaron generando daños materiales. Michelle Soto Fielder, una de las afectadas afirmó que su lavadora comprada en 2012 explotó este año, generando daños en las paredes de su garaje, donde se encontraba el aparato.
Esta es la lavadora de Michelle Soto, una de las afectadas por las explosiones.
El abogado de esta persona afectada declaró que las lavadoras con riesgo de explosión pertenecen a las líneas WA400 y WA500 de Samsung. En la demanda presentada en una corte federal de Nueva Jersey también se afirmó que Samsung se «ha movido agresivamente para recoger y destruir todas las pruebas de las máquinas defectuosas» después de que explotaron.
Los portavoces de la CPSC y de Samsung se negaron a hacer comentarios sobre este tema.
Vía: Wall Street Journal.
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