Bogotá: Una agencia analítica de datos y el ambicioso plan para convertirse en una ciudad inteligente

Bogotá
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A diferencia de lo que pasa en urbes como Seúl o Shanghai, la revolución smart de Bogotá es más silenciosa y, si uno no presta atención, es fácil asumir que no ocurre. Pero lo hace: el ambicioso viaje de la capital colombiana para convertirse en una ciudad inteligente ha estado orientado desde el comienzo por una inquebrantable devoción por los datos.

La punta de lanza de esa estrategia es una agencia de análisis de datos que representa un avance concreto en la forma en que la ciudad utiliza los datos para revolucionar sus capacidades de servicio público, mejorar la seguridad pública y prevenir el delito.

Se llama AGATA y es la responsable de ofrecer tecnología analítica que brinda una visión de 360 grados de los ciudadanos y mejora la gestión de los servicios públicos.

Un muy reciente ejemplo de sus capacidades se dio en virtud de una alianza con la Secretaría de Desarrollo, en colaboración con Google Cloud, para crear la iniciativa Bogotá Trabaja Te Conecta.

Mediante soluciones de inteligencia artificial y analítica, Bogotá Trabaja Te Conecta canaliza hacia entidades del sector público información actualizada sobre la demanda laboral y, enfrenta desde la tecnología el reto de entender por qué quienes lo necesitan no consiguen empleo o por qué las empresas no captan el talento que buscan.

Como esta, otras iniciativas de AGATA le permiten a la ciudad dar respuestas automatizadas a las solicitudes de servicio que se reciben vía redes sociales, así como analizar el universo de datos que recoge una vasta red de sensores inteligentes en toda la ciudad.

El uso de esa información afecta toda clase de procesos: de reducir el consumo de energía a  gestionar el tráfico y monitorear el uso de los espacios de parqueo en las calles. Incluso se está empezando a usar para evaluar los riesgos ambientales relacionados con inundaciones, deslizamientos de tierra o incendios forestales.

El uso de la analítica para la prevención del delito también es una prioridad. AGATA tendrá nuevas capacidades para monitorear las cámaras de seguridad de la ciudad y desarrollar modelos predictivos basados en datos destinados a reducir el crimen, incluido el uso de tecnologías emergentes como blockchain.

La propuesta es dar forma a un modelo de seguridad inteligente mediante el uso de tecnología, de análisis de datos, coordinación de cámaras, de denuncias ciudadanas, línea 123, botones de pánico, alarmas comunitarias, e información de inteligencia para identificar las zonas con mayor incidencia de delitos y preparar una intervención integral, oportuna y eficaz de los organismos de inteligencia.

'Sin conectividad, no hay inclusión'

Bogotá cumplirá 500 años en 2038. La historia de la capital colombiana es a la vez causa y consecuencia de la historia misma de la Nación, ya que en ella se conjugan, como en ninguna otra, la efervescente mezcla de razas, creencias y costumbres que dan vida a la cotidianidad de esta maravillosa ciudad.

Según el informe de las Naciones Unidas sobre las perspectivas de la urbanización en el mundo, revisado por última vez en 2018, las ciudades modernas que enfrentan los procesos más rápidos de urbanización enfrentan también las mayores afectaciones por el cambio climático y necesitan fórmulas nuevas para enfrentarlas.

Estas ciudades, como muchas otras, han visto sus presupuestos limitados por el impacto económico de la COVID-19, así como por el aumento de los costos de la energía y los alimentos. Con más de siete millones de habitantes, una crisis de inmigración sin precedentes y las secuelas de la pandemia todavía visibles en su economía, Bogotá enfrenta esa clase de vulnerabilidad.

Y, sin embargo, las señales están ahí: Las aspiraciones de ciudad inteligente de Bogotá no son puro hype. Con todos sus problemas, TransMilenio, su icónico sistema de autobuses de tránsito rápido ha revolucionado la movilidad, reduciendo drásticamente los tiempos de viaje y reduciendo las emisiones. Una sólida red de ciclorrutas fomenta el transporte sostenible, mientras que los puntos de acceso Wi-Fi públicos gratuitos democratizan el acceso a la información.

"Sin conectividad, no hay inclusión en el siglo XXI, y por eso queremos hacer de Bogotá una ciudad inteligente, segura y más transparente para todos sus ciudadanos. Bogotá necesita transformar la información en datos para que los ciudadanos puedan tomar mejores decisiones y para eso están las analíticas"—Claudia López, alcaldesa de Bogotá.

Pero la aspiración de ciudad inteligente de Bogotá va más allá de los aparatos llamativos y abre espacios de empoderamiento de ciudadanos y comunidades. Los "ecobarrios", vecindarios autosuficientes construidos sobre principios de sostenibilidad y participación comunitaria, muestran este enfoque centrado en el ser humano. Los residentes participan en la gestión de residuos y la conservación de los recursos, lo que fomenta entre ellos un sentido de propiedad y responsabilidad compartida.

Puede que no dependa de procesadores y pantallas, pero esta nueva forma de intervención ES inteligente: permite no solo mejorar el cuidado del medio ambiente sino también construir tejido social y fortalecer la relación entre vecinos; también genera una conciencia de cuidado sobre el espacio público. De esta manera, los ecobarrios son una apuesta a largo plazo por transformar la ciudad.

No es el único ejemplo. Gracias al trabajo conjunto de las Secretarías General, de Educación Distrital, y de Desarrollo Económico de la Alcaldía Mayor, se logró consolidar una oferta de programas de formación pertinente en habilidades de 4RI.

Como resultado, en la vigencia 2021, casi diez mil ciudadanos iniciaron cursos relacionados con Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas y habilidades para el siglo XXI como, por ejemplo: redes de telecomunicaciones, programación, computación en la nube, bilingüismo, entre otros.

En el marco del programa de Jóvenes a la U, más de dos mil jóvenes de Bogotá aplicaron a carreras relacionadas con temas de cuarta revolución industrial.

El plan de desarrollo de 2020-2024 hace referencia a proyectos estratégicos de especialización inteligente que enmarcan a Bogotá como Ciudad- Región sostenible y que tiene una visión hacia plataformas logísticas para distribución urbana, sistemas inteligentes de transporte, desarrollo de soluciones innovadoras para mejorar del sistema hídrico del río Bogotá y programas de eficiencia energética y construcción sostenible, entre otros.

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