Lo primero que llama la atención del Galaxy S23 Ultra es lo notablemente parecido que resulta a su antecesor, el excelente Galaxy S22 Ultra. Y aunque parecerse mucho al que bien podría ser el mejor teléfono Samsung de los últimos cinco años no es en sí mismo algo malo, es una sensación que no termina uno de sacudirse.
Probamos el S23 Ultra por un breve espacio, pero familiarizados como estamos con el que en la práctica es el segmento heredero de la línea Note, sabíamos qué buscar: fiel a su sitio en la cima de la pirámide de los celulares Samsung (al menos, de los celulares Samsung que no se doblan a la mitad), el S23 justifica el ‘Ultra’ en desempeño, prestaciones… y precio.
Samsung, no podía ser de otra manera, no usó menos que la última tecnología para su buque insignia. Así, el S23 Ultra incorpora una nueva DRAM LPDDR5x, memoria UFS 4.0 súper rápida, una pantalla LTPO más brillante y dos nuevos sensores para la cámara cuádruple, incluida la primera óptica de 200 MP en un teléfono inteligente de la línea Galaxy.
Este año, en una señal del paso de los tiempos, el procesador Exynos se hace a un lado para dejar pasar al Snapdragon 8 Gen 2, que al menos nominalmente es más rápido que el modelo SoC estándar.
Así las cosas, vamos a pasar revista a las principales características del celular más impresionante de Samsung, al menos hasta que Samsung lance otro celular.
Diseño y conectividad
A pesar de que el primer vistazo lo hace lucir como un S22 Ultra renovado, en el uso es apreciable de inmediato un cambio sutil, pero significativo: Samsung redujo la curvatura de la pantalla en sus laterales, lo que se traduce de inmediato en más propiedad raíz para los dedos. También ofrece más espacio para usar el S Pen, que sigue siendo un plus innegable del modelo Ultra.
Por lo demás, se trata de un dispositivo construido para durar. El vidrio de la pantalla se funde perfectamente en el marco y, protegido como está Corning Gorilla Glass Victus 2, además de la ya acostumbrada protección IP68 contra el agua y el polvo, es realmente, incuestionablemente, muy resistente.
Como en el S22 Ultra, la conectividad USB 3.2 está allí, así como el modo de escritorio DeX, para usar tu Galaxy S23 Ultra como la CPU de un computador. El equipo puede acomodar dos nano-SIM físicas, ambas compatibles con 5G, además de aceptar eSIM.
Cámaras para todas las necesidades
El área de la fotografía ha sido por años prácticamente la tarjeta de presentación de la línea Galaxy y Samsung claramente lo asume así. Por eso, por primera vez… ever, la cámara principal empaca unos apabullantes 200 MP. Aparte del S23 Ultra, solo el Xiaomi 12T Pro y el Motorola Edge 30 Ultra tienen un sensor de esa magnitud.
Es de destacar que sigue siendo posible tomar las fotos en formato RAW, algo que tiene sentido con semejante sensor, pero para ello hay que descargar la aplicación Expert RAW, que es gratuita en la Galaxy Store. Esto no solo te permitirá hacer un universo de ajustes manuales, sino que también, hablando de universo, te permitirá probar el modo astrofoto, que captura largas exposiciones de cielos nocturnos para todos aquellos que no estén bajo la permanente capa de nubes y contaminación lumínica de Bogotá.
En cuanto al ultra gran angular también hay mejoras. Gracias a un modo automatizado, puede usarse también como lente macro. Es, sin duda, una versatilidad que se agradece. Como estamos acostumbrados, el S23 Ultra nos ofrece zoom óptico de 3x y e 10x, pero si no te importa perder calidad, zoom digital de 100x logra resultados aceptables en ciertos casos.
Desempeño y precio en Colombia
Como todos los integrantes de su serie, el Samsung Galaxy S23 Ultra despliega un Snapdragon 8 Gen 2 para Galaxy de Qualcomm, que puede acceder a 8 ó 12 GB de RAM dependiendo de la configuración. El equipo corre Android 13 bajo One UI 5.1 y debería recibir cuatro actualizaciones del sistema y al menos cinco años de parches de seguridad.
En nuestra prueba, resultó predeciblemente difícil de sobrecargar, y desempeñó las tareas más exigentes en escenarios de trabajo, reproducción de video o gaming sin aspavientos. No es un terminal que se vaya a calentar con facilidad. La batería aguanta de sobra un día de uso intenso, pero hay que estar pendiente de ajustar razonablemente el brillo de la pantalla. La carga rápida, en este rango de precios, podría ser más rápida.
Por tratarse de la cúspide de una línea a la que en realidad hay poco que criticarle, el Galaxy S22 Ultra es uno de los teléfonos más caros del mercado, con un precio de 6.999.920 pesos en la tienda Samsung. Por el momento, la firma ofrece la versión de 512 GB por ese precio, que regularmente corresponde a la versión de 256 GB. También ha habilitado un plan recambio que permite entregar un equipo usado de casi cualquier marca en casi cualquier estado como parte de pago.
Eso quiere decir que, si tienes el S22 Ultra, no tiene mucho sentido hacer el cambio, toda vez que en el mejor de los casos el equipo usado equivaldría a poco más de dos millones de pesos en el precio del nuevo. Sin embargo, quienes tengan un teléfono de tres años o más, como por ejemplo un Note 10 o Note 20, sin duda verían justificado el trueque, en especial si reciben un millón o un millón y medio por su equipo viejo.