Fitbit ya renovó su catálogo de pulseras cuantificadoras con una más ambiciosa Fitbit Blaze durante el CES de Las Vegas a principios de año y ahora vuelve a la carga con otro modelo más modesto en cuanto a prestaciones pero que como en el caso anterior se centra especialmente en el terreno del diseño y la personalización.
Las nuevas Fitbit Alta son pulseras que heredan la tecnología SmartTrack, lo que significa que reconocerán automáticamente el tipo de ejercicio que estás haciendo, pero a su espartana pantalla OLED le añaden un elemento interesante para muchos usuarios: podrá intercambiarse la pulsera en la que se integra esa pantalla, y habrá modelos en plástico de cuatro colores distintos además de la piel y el acero inoxidable.
Personalización por bandera
Así pues esta Fitbit Alta será en cierto sentido una pulsera "modular" en a que la pantalla y la correa son dos partes diferenciadas. Para acceder a una de las correas alternativas tendremos que pagar 30 euros por los modelos de plástico, 70 euros por el de piel y 100 euros por el de acero inoxidable.
Aunque no contamos con sensor de ritmo cardíaco, sí que dispondremos de las habituales virtudes de las pulseras cuantificadoras de Fitbit en cuanto a monitorización de actividad física o del sueño, además de las notificaciones que tratarán de hacer que nos levantemos del asiento para quemar unas calorías de cuando en cuando.
Esta nueva pulsera cuantificadora tiene un precio de 139,95 euros y ya está disponible para reservar en el sitio web oficial del fabricante, aunque mañana lo estará en Amazon y otras cadenas de tiendas de electrónica de consumo. Las FitBit Alta comenzarán a llegar a los usuarios que las reserven en algún momento del mes de marzo.
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