Hace tiempo Microsoft comenzó a explorar la posibilidad de ofrecer soporte para ratón y teclado en su consola, la Xbox One. Esa opción se hace ahora realidad con el anuncio oficial de un conjunto de periféricos llamado Razer Turret que cuentan con un diseño singular.
Desarrollados por la conocida firma de equipos y periféricos de gaming Razer, este teclado tiene la peculiaridad de contar con una especie de alfombrilla rígida extraíble que sirve para ofrecer esa necesaria superficie de movimiento al ratón que acompaña a este producto.
Jugando desde el sofá no saldrá barato
Ambos dispositivos se conectan de forma inalámbrica a la Xbox One, y en el caso del teclado nos encontramos con una disposición sin teclado numérico, aunque sí ofrezca el conocido sistema de iluminación RGB de Razer.
Lo realmente llamativo del teclado es esa superficie retráctil que podemos "extraer" del teclado para apoyar el ratón en ella, algo que permite usarlo sin aparentes problemas sentado en el sillón o el sofá del salón donde muchos usuarios disfrutan de su consola.
Aunque es posible usar teclados y ratones con cable en la Xbox One a partir de ahora, el modelo de Razer será el único que de momento podrá conectarse de forma inalámbrica.
Esta es en realidad la segunda generación de este dispositivo de Razer que permitía jugar a juegos de PC desde el sofá y que se lanzó hace dos años y medio. La empresa no ha indicado si el teclado es mecánico, pero con el precio de partida que tiene es de esperar que el sistema utilizado no sea de membrana, más común en productos más económicos.
El teclado ha sido anunciado oficialmente, pero no estará disponible hasta finales del mes de marzo. Los interesados pueden prereservarlo ya en la tienda Microsoft Store, y su precio es de 249,99 dólares. El coste es por tanto elevado, sobre todo teniendo en cuenta que hay ofertas que sitúan una Xbox One S incluso por debajo de ese precio.
Vía | VentureBeat