las inminentes redes 5G son uno de los temas que están teniendo protagonismo en el CES 2019 que se celebra estos días en Las Vegas, y en Qualcomm están hablando del futuro de estas redes y su impacto en un ámbito muy especial: el de la automoción.
Los responsables de Qualcomm creen que los coches conectados del futuro —y hablan de un futuro próximo— permitirán hacer el transporte más eficiente, seguro, entretenido (para los pasajeros) y sostenible que nunca, y para ello ya están preparando una plataforma con tres capas que hará uso de chips similares al Snapdragon 855, pero aplicados de forma específica a este campo.
Todo parecen ventajas con el coche conectado vía 5G
Pattrick Little, responsable de la división de automoción de Qualcomm, explicó cómo el 75% de los coches que se lancen en los próximos 5 años llevarán integrada la conectividad móvil, tanto para ofrecer servicios como por seguridad.
Según sus palabras la tecnología de asistencia estará más presente que nunca, y de hecho esos servicios de suscripción asociados al coche podrían ofrecer más beneficios económicos que los propios coches.
La revolución de la conectividad 5G tendrá beneficios muy importantes para el mundo del transporte: los coches conectados reducirán drásticamente el tráfico y la poca eficiencia del transporte actual, aseguran en Qualcomm, donde indican que estos problemas están provocando grandes pérdidas.
Solo en Estados Unidos estiman que se han perdido 305.000 de dólares, pero las consecuencias son mucho más trágicas en el número de muertes en carretera, que ascienden a 1,35 millones de personas al año en todo el mundo. También dieron dato relativo a las emisiones de gases de efecto invernadero: el 28% de todas ellas provienen de los medios de transporte.
La tecnología que está desarrollando Qualcomm incluye temas como el de los frenos "inteligentes", la conexión con los sistemas de señalización incluso en cruces para evitar potenciales accidentes.
La tecnología llamada C-V2X (Cellular vehicle-to-everything) será según Qualcomm pilar fundamental para que los vehículos se conecten tanto entre ellos como con un gran número de sistemas de su entorno.
La implantación de estas soluciones ya se ha iniciado en Estados Unidos, donde existen proyectos en marcha para mostrar su potencial. Ford apuesta por ella, por ejemplo, y desde la marca aseguran que comenzarán a implantarla en todos sus modelos a partir de 2022.
Una nueva plataforma con el Snapdragon 855 como inspiración
Qualcomm ha aprovechado la ocasión para presentar nuevos chips diseñados para su integración en el campo de la automoción. La llamada "Snapdragon Automotive Cockpit Platform" engloba tres tipos de soluciones (Performance, Premiere y Paramount) con las que la empresa quiere cubrir todos los segmentos.
En esta plataforma se hace uso de una arquitectura similar a la de los Snapdragon 855. La CPU Kryo de la familia 400 (en el Snapdragon 855 se usan ocho núcleos Kryo 485) y una GPU Adreno de la serie 600 (probablemente el Adreno 680, la más potente) podría ser utilizada para estas soluciones.
Aquí también especial relevancia los llamados aceleradores Tensor que ya se presentaron en el coprocesador Hexagon de los Snapdragon 855. Qualcomm quiere aprovechar estas nuevas unidades de proceso para que realicen tareas muy eficientes en el ámbito de la inteligencia artificial como el procesador de voz o la clasificación de objetos.
Estas soluciones de las nuevas plataformas para automoción de Qualcomm podrán operar con Android, Linux y sistemas de tiempo real que ya llevan tiempo utilizándose en el campo de la automoción. Además pueden ser emparejadas con distintas unidades de control del motor (ECU) y con pantallas y sistemas de sonido de distinto tipo para ofrecer todo tipo de contenidos —hablaron de una alianza ya existente con Amazon para integrar Alexa y los servicios de entretenimiento de Amazon— e información a través de estos sistemas.
Incluso hay soporte para conectividad WiFi 6 (802.11ax), estándares Bluetooth y por supuesto sistemas de navegación por satélite. Estas plataformas también tienen aplicaciones en el campo de la seguridad al volante. Se pueden utilizar para monitorizar el interior del vehículo y detectar el estado de alerta del conductor (para que no se duerma o despiste mientras conduce) o para asistirle en giros y cambios de carril.
Aquí podrían entrar también en acción soluciones que aprovechen tecnologías de realidad aumentada que "proyecten" información sobre la carretera mientras conducimos, y los responsables de Qualcomm ya están trabajando con diversos fabricantes de la industria para ir integrando estos sistemas.
No hay fechas específicas que nos permitan saber cuándo estarán realmente en carretera esos coches del futuro, pero lo que es seguro es que Qualcomm quiere ser partícipe de esa revolución del coche conectado.
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