En la actualidad coexisten los trenes eléctricos y los que funcionan con motor diésel, y en la carrera por conseguir limpiar un poco nuestra atmósfera (o, más bien ensuciarla menos) también entra que los segundos vayan reemplazándose. Una opción son los trenes alimentados por batería, y ahora Alemania vuelve a apostar por ellos.
En este caso se trata de una inversión que el gobierno alemán ha realizado en la compañía canadiense Bombarier, un fabricante de aviones y trenes que tiene en marcha varios proyectos centrados en lograr un transporte más eficiente y respetuoso con el medio ambiente. En este caso, se trata de trenes impulsados parcialmente por una batería, de modo que no requieren una fuente de alimentación externa o una infraestructura durante el transporte.
Trenes más limpios y más silenciosos
Según afirmaba Michael Fohrer (máximo representante de Bombardier en Alemania) en la presentación de su nuevo tren en Berlín, el 40% de los trenes del país europeo funcionan con motor diésel, de ahí que la idea sea reducir este porcentaje cambiando el tipo de trenes. Optar por trenes eléctricos (estándar) supone electrificar la línea, lo cual implica añadir una infraestructura además del cambio de vehículos, y es donde pueden entrar estos trenes.
En concreto lo que presentaron fue otro prototipo, el BOMBARDIER TALENT 3, que integra cuatro baterías de polímero de litio Bombardier MITRAC, que le dan una autonomía de 40 kilómetros, si bien en la hoja de ruta de la empresa figura mejorar hasta los 100 kilómetros. Unas pilas que, según detallan en Electrek, pueden montarse en distintas configuraciones de motores eléctricos y packs de baterías.
Las otras ventajas de las que hablan tanto gobierno como compañía son la eficiencia y la reducción del ruido. Según afirman en el comunicado que enlazábamos, el motor no genera ningún escape en forma de gas contaminante y es un 50% más silencioso que los trenes impulsados por motor diésel.
El camino hacia el ferrocarril con cero emisiones
Los trenes con baterías no son algo nuevo, de hecho Alemania ya apostó por ello en la década de los sesenta. Se usaron también en Nueva Zelanda a principios del siglo XX y en la actualidad hay otras empresas y países que trabajan e invierten en ellos, como Austria (ÖBB) y Siemens o Vivarail, quienes explicaban aquí el funcionamiento y las características de estos trenes (subidos a uno) en este reportaje:
El problema es que son trenes más caros que los de motor diésel, además de que son necesarias las estaciones de carga (sobre todo si las autonomías son "cortas". El que ha presentado Bombardier empezará las pruebas con pasajeros en la zona del lago Costanza, durante un total de doce meses.
Veremos si estos trenes acaban siendo la mejor solución a la electrificación de los que funcionan con motor diésel, y que por tanto contribuyen a la emisión de gases contaminantes. También hay en este caso opción al hidrógeno, o al menos eso se planteaban hace tres años en China y más recientemente el Coradia iLint, prometiendo una autonomía de hasta 1.000 kilómetros.
Vía | Engadget
En Xataka | China se atreve con un tren de hidrógeno