El Aeropuerto Internacional El Dorado de Bogotá ha alcanzado un hito histórico al convertirse en el terminal aéreo con mayor movimiento de pasajeros en toda Latinoamérica, con un total de 45.802.360 viajeros movilizados en 2024.
Este logro lo posiciona por encima del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), que había sido el aeropuerto con mayor movimiento de pasajeros en América Latina debido a la enorme demanda que genera la séptima ciudad más poblada del mundo.
Sin embargo, algunas medidas del gobierno mexicano para reducir su congestión debido a que la infraestructura actual no soporta el flujo actual, provocó que el tráfico de pasajeros en el AICM se redujera en un 6.2 por ciento, pasando de 48 millones en 2023 a 45.359.485 pasajeros.
Por otra parte, la expansión y modernización continúa de El Dorado, le ha permitido garantizar una operación eficiente y en crecimiento que posicionan a Colombia como un centro de conexión clave en la región.
Factores que impulsan el crecimiento
(Alcaldía de Bogotá)
El incremento en el tráfico aéreo de El Dorado se debe a diversos factores, entre ellos el que más destaca es la expansión de rutas y aerolíneas. En los últimos años, compañías como Emirates, Edelweiss y JetSMART han iniciado operaciones en Bogotá, ampliando la oferta de vuelos nacionales e internacionales.
Asimismo, tras la salida de Viva Air y Ultra Air en 2022, aerolíneas como Avianca y LATAM absorbieron parte de la demanda con la reasignación de slots, optimizando el uso de las franjas horarias disponibles.
Por otra parte, en 2024 se iniciaron ampliaciones en la plataforma aérea, con la construcción de 47.139 m² que permitirán aumentar de 91 a 98 posiciones de estacionamiento de aeronaves.
Por último, se habilitaron nuevos espacios en la antigua terminal del Puente Aéreo, mejorando la capacidad de espera y abordaje para los pasajeros.
Tecnología y logística: claves en la operación
(ANI)
Para mantener su eficiencia y atender el creciente flujo de pasajeros, El Dorado ha implementado diversas soluciones tecnológicas en aspectos de seguridad, control de pasajeros y gestión aeroportuaria.
Por ejemplo, cuenta con sistemas de reconocimiento biométrico en migración y embarque para agilizar los procesos de identificación. Mientras que cámaras que incorporan tecnología de inteligencia artificial detectan comportamientos sospechosos y alertan a las autoridades.
Por otra parte, se cuenta con controles de rayos X de última generación en los filtros de seguridad para una revisión más precisa y rápida del equipaje.
En cuanto a la automatización y eficiencia en el manejo de pasajeros, se han implementado quioscos de auto check-in y etiquetado automático de equipaje, reduciendo los tiempos de espera.
Esto mientras una plataforma de monitoreo en tiempo real optimiza la distribución de pasajeros y reduce congestiones en puntos críticos. Incluso se está implementando IA en la planificación de vuelos, permitiendo ajustes dinámicos según la demanda y las condiciones climáticas.
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