El verano es una época terrible para parte de los bosques de nuestro planeta: los incendios los asolan y causan verdaderas tragedias naturales. Las áreas afectadas por esos incendios deben luego someterse a programas de reforestación que son ejecutados por personal humano, pero puede que en pocos años esa labor pueda ser realizada de forma automática por robots.
Un proyecto llamado TreeRover creado por dos jóvenes estudiantes canadienses de Ingeniería Eléctrica hace uso de un prototipo de robot que podría asistir al ser humano en esas tareas de reforestación. El robot se mueve gracias a sus cuatro ruedas y a una batería que también suministra la corriente para su singular sistema de plantación de árboles. Y no es el único proyecto que promete en este sentido: los drones podrían plantear otra de las alternativas más relevantes.
La reforestación robótica promete
En la parte superior del TreeRover encontramos un depósito con capacidad para diez pequeños árboles en las primeras fases de su crecimiento que son la semilla perfecta para esos programas de reforestación. El robot dispone de un sistema de aire comprimido que realiza un agujero para luego introducir el arbolito en ese hoyo.
A continuación el robot aplica un pequeño prensado de la tierra para que las raíces y el árbol estén bien sujetos desde el primer momento, y el motor eléctricos hace que el robot se desplace en la dirección y distancia indicados por el usuario para plantar el siguiente árbol a continuación.
Aunque el robot es por ahora bastante básico y solo se mueve en línea recta, sus creadores afirman que ya están trabajando en una mejora que permitirá integrar un GPS y un sistema de detección de objetos que le permitirá sortear obstáculos y seguir patrones de plantado más complejos.
En septiembre pondrán en marcha una campaña de financiación en Indiegogo para tratar de ganar financiación para un proyecto que necesitará apoyo económico. La aportación económica -no determinada aún- no permitirá que compremos estos robots, sino que servirá para que éstos se puedan usar cuanto antes y, eso sí, uno de los árboles se plantará con una dedicatoria y vídeo para quien apoye el proyecto.
Drones al rescate
El proyecto de estos dos jóvenes no es el único que ha aparecido con esa intención y hace años ya pudimos ver cómo la dieñadora industrial Anna-Karin Bergkvist publicó sus propias ideas en forma de un robot capaz de plantar árboles.
Ese robot nunca llegó a convertirse en una realidad, pero lo que sí lo es es un proyecto de la empresa británica BioCarbon Engineering que quiere combatir la deforestación con drones. Estos vehículos permiten según los responsables de la idea reducir los costes de la reforestación convencional al 15% y además hacerlo mucho más rápidamente. El objetivo, de hecho, es llegar a plantar 1.000 millones de árboles al año.
Para cumplir su misión estos drones literalmente dispararían semillas pregerminadas que gracias a la presión del lanzamiento lograrían quedar enterradas en la superficie. Esas semillas irían encapsuladas y envueltas en un hidrogel rico en nutrientes orientado a acelerar esas primeras fases de germinación. Y todo ello con una planificación previa basada en detallados mapas 3D de las áreas a reforestar.
Las dos opciones parecen realmente interesantes, aunque sí aparecen por ejemplo dudas sobre los drones en cuanto a la eficiencia de un método que probablemente tendría tasas de fallo importantes. En las tareas de reforestación los encargados humanos del proceso a menudo tienen muy en cuenta el tiempo de terreno una vez empiezan a cavar y la profundidad del hoyo en el que irá plantado cada nuevo árbol. Sea como fuere, toda ayuda es poca: si los drones y los robots pueden ayudar en esas tareas, bienvenidos sean.
Vía | TreeHugger | CBC.ca
En Xataka | Si pones un árbol de Navidad en casa, que sea uno impreso en 3D que no deje restos
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