No es una broma: ya existe un Congreso sobre el Amor y el Sexo con Robots. Los investigadores que están trabajando en este ámbito debatieron allí sobre el futuro de los robots en este ámbito, y las conclusiones eran más preocupantes de lo que podríamos imaginar.
El experto suizo Oliver Bendel avisó de esos peligros, y destacó tanto la amenaza de robots que podrían esforzarse demasiado para la resistencia humana —recordemos, los robots no se cansan y "no les duele la cabeza"—, pero también el hecho de que estos robots podrían tener relaciones sexuales tan placenteras que algunos plantean que ya ningún ser humano querría hacerlo con otro ser humano.
Los problemas del sexo robótico
Las cuestiones éticas plantean por tanto un debate en varios niveles. Bendel indicaba cómo los sistemas de aprendizaje automático y de inteligencia artificial podrían incluso acabar sirviendo para que los robots "sedujesen" a los humanos.
También había cuestiones menores pero no por ello descartables: ¿deberían los robots sexuales estar dispuestos para cumplir esa función en todo momento? ¿estarían dispuestos también a cumplir todas las fantasías sexuales, por moralmente discutibles que estas fueran?
La llegada de estos robots sexuales también podría crear una nueva brecha digital entre aquellos que se los pueden permitir y los que no, y aquellos que simplemente serán suplantados por esas máquinas. Muchas son las dudas que nuevamente plantea un ámbito en el que puede que no se vean soluciones reales a corto plazo, pero que desde luego no está tan lejos como parecía hace unos años.
Vía | The Register
En Xataka | Hay quien quiere construir una ética del sexo con robots (y prohibirlo, claro)