Hace algunos días, el Congreso de Colombia aprobó la polémica Reforma Tributaria. Uno de los puntos más importantes de este nuevo estatuto es el aumento en el precio de los combustibles fósiles, a pesar de que Colombia tiene una de las gasolinas más caras de América Latina.
En el Senado el nuevo cobro es conocido como 'Impuesto Verde' y según estos legisladores, tiene como objetivo reducir el uso de los combustibles tradicionales como la gasolina, el ACPM y el gas natural. Sin embargo, Colombia es uno de los países que menos genera energía alternativa, entonces ¿por qué gravar aún más estos comburentes?
Qué es y cómo funciona el impuesto al carbono
El impuesto al carbono es un cargo que se comenzó a implementar en diferentes países desde 2007, por el daño ambiental que generan los combustibles fósiles y la liberación de dióxido de carbono a la atmósfera. Este impuesto tomó fuerza con la ratificación del Acuerdo Climático de París en 2015, al que se acogió Colombia en septiembre de este año.
En el acuerdo, cientos de países se comprometieron a mantener el calentamiento global en su índice más bajo y reducir la emisión de gases de efecto invernadero. Cabe resaltar que actualmente solo siete países gravan el carbono, entre ellos Australia, Suecia, Chile e Irlanda.
A pesar de que este nuevo impuesto ha tenido efectos positivos en la reducción del uso de combustibles fósiles, los países antes mencionados están haciendo todo su esfuerzo para que toda o gran parte de la energía que necesitan sea renovable. Varios expertos están de acuerdo con el impuesto verde, pero aplicando una reducción a otros cargos para no afectar la economía.
Así se aplicó el Impuesto Verde en Colombia
En teoría, el Impuesto Verde tiene el mismo propósito que el impuesto al carbono: reducir el uso de combustibles fósiles para favorecer al medio ambiente. En concreto, en Colombia el precio del galón de gasolina aumentará $135 pesos y $152 el de ACPM; adicionalmente, el metro cúbico de gas natural aumentará $29 pesos y el de propano $95.
Las consecuencias del nuevo impuesto
Como lo mencionábamos hace algunos meses, Colombia sufrió una grave crisis energética por no generar energía alternativa. Actualmente el gobierno impulsa muy pocos proyectos a gran escala para dejar de depender del agua, del petróleo y del gas natural para generar electricidad.
Por otro lado, la mayoría de vehículos en Colombia utilizan combustibles fósiles. A pesar de que diversas marcas han traído medios de transporte alternativos, el completo suministro de alimentos y bienes de la canasta familiar depende de vehículos que utilizan gasolina y ACPM.
Según la Asociación del Transporte Aéreo en Colombia (ATAC), este nuevo impuesto aumentará el valor de los pasajes entre un 2,7 % y un 3 %, lo que llevaría -según dicen- a reducir la demanda en 700.000 pasajeros por año. Lejos de ver el beneficio de este impuesto, en Colombia toda la economía se verá afectada desde el 2017.
Según Gregory Mankiw, profesor de economía en Harvard, el impuesto al carbono le permite a los países ahorrar millones de dólares que se gastan cada año en la atención de desastres naturales. Sin embargo, este experto afirma que la correcta aplicación del cargo sería recortando otros impuestos, para equilibrarlo.
El profesor está de acuerdo con gravar el carbono, con la condición de que el gobierno reduzca otros impuestos, para que no sea una carga a más a los ciudadanos, sino que sea un cambio de enfoque en el dinero recaudado. En Colombia la situación es muy distinta, lejos de reducir los impuestos, nos acercamos rápidamente a un nuevo aumento de éstos.
Más información en Carbon Tax.
En Xataka Colombia | Se aprobó la Reforma Tributaria: así quedan los impuestos tecnológicos para el próximo año.
En Xataka Colombia | Así funcionará el cobro del IVA en Netflix y Spotify tras la reforma tributaria en Colombia.
En Xataka Colombia | Colombia se quedó atrás a la hora de producir energía renovable.
Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com.co
VER 0 Comentario