El municipio palmero de Puntagorda ha dado el sí definitivo al Telescopio de Treinta Metros y ha concedido las licencias necesarias para arrebatarle el mayor telescopio del hemisferio norte a la isla de Hawái. Es decir, a falta de ordenar la construcción, la isla de La Palma se prepara para recibir al telescopio en cuanto el Consorcio admita de una vez que lo de Mauna Kea es una vía muerta.
Y, según parece, eso va a pasar más pronto que tarde. El próximo 23 de noviembre, el consorcio del Telescopio de Treinta Metros volverá a reunirse con el mismo tema encima de la mesa: ¿Qué hacen con el enorme proyecto de 1.200 millones de dólares y 18 plantas de altura que sigue bloqueado por la oposición popular de los hawaianos?
La noticia ahora es que ya tienen un plan alternativo.
Si el problema el Mauna Kea, Roque de los Muchachos es la solución
Esto no quiere decir que el día 23 se tome la decisión de traer el telescopio a España, pero suma presión a un asunto que lleva encallado mucho tiempo. Las obras del observatorio deberían haber empezado el 15 de julio de 2019 y, sin embargo, la enorme oposición de buena parte de la población hawaiana y el apoyo de figuras como Leonardo DiCaprio, Jason Momoa, 'La Roca' Jackson o Bruno Mars lo lleva paralizando desde entonces
Según las antiguas tradiciones de la isla, las cumbres montañosas son sagradas y Mauna Kea, la más alta de ellas, lo es aún más. Aunque el proyecto del Telescopio de Treinta Metros lleva en marcha desde los años 80, fue en 2009 cuando se eligió Hawai y, desde entonces, la carrera por detenerlo ha protagonizado buena parte de la política local.
Ante el bloqueo, fue el mismo Consorcio el que pidió a las autoridades canarias que iniciaran los trámites para estudiar la localización si el plan inicial fracasaba. Las instituciones españolas han respondido y desde ayer solo falta que den luz verde para empezar a construir en las 10 hectáreas que Puntagorda ha cedido al Instituto Astronómico de Canarias.
El TMT suponen 1.200 millones de euros, un edificio de 18 plantas, decenas puestos de trabajo cualificados durante más de 50 años y reforzar a canarias como el lugar clave de la investigación astronómica. Pero también es una oportunidad que no podemos perder para aprender a combinar la protección de uno de los parajes naturales más interesantes del país con la investigación más puntera.
Ya está todo listo: España esta vez sí que ha hecho los deberes