El 22 de diciembre de 1969, cinco meses después de la llegada del hombre a la Luna y treinta meses después de la publicación de Cien Años de Soledad, el Planetario de Bogotá abrió sus puertas con una luminaria de talla mundial: un pryector Zeiss Model VI, capaz de reproducir con precisión en el por entonces flamante domo de la edificación el recorrido de 8.900 estrellas (incluyendo el Sol), los planetas, la Vía Láctea, cometas, estrellas fugaces, eclipses y otros cuerpos celestes.
Según se cuenta, Veb Carl Zeiss, empresa de la entonces República Democrática Alemana, a través de la Federación Nacional de Cafeteros, hizo llegar el Model VI a Colombia a cambio de sacos de café. El proyector -conocido cariñosamente como ‘La Hormiga’ por su forma peculiar- ha estado en el domo desde entonces.
Pero ahora, el Instituto Distrital de las Artes (Idartes), anunció un plan de transformación del Planetario que consignará a los libros de Historia al veterano proyector óptico.
Según indicó la entidad, el domo dejará de ser un espacio estático para convertirse en un lugar flexible que pasará de recibir 375 personas en sus eventos de ciencia, tecnología y arte, a recibir hasta a 700 personas por función. También dejará atrás la tradicional distribución circular de sillas y creará un escenario que posibilitará múltiples tipos de montajes.
Esto se complementa con su sistema de proyección Digistar 7, dotado con dos poderosos proyectores digitales Christie Griffyn 4K32-RGB con resolución 4K, que ya están en operación y que desde el 2021 han permitido a los visitantes del Planetario viajar por el universo y ver millones de estrellas detalladamente.
Como parte de esta transformación del domo, La Hormiga ya no estará en el centro, pero permanecerá en el Planetario como un símbolo de su historia de más de medio siglo.
La última función de La Hormiga
Los primeros proyectores para planetarios modernos fueron diseñados y construidos por Zeiss Works de Jena (Alemania) en 1924. Estas intrincadas piezas de óptica y mecánica están diseñadas para ubicarse bajo una cúpula o domo, exactamente en el centro, y proyectar una imagen precisa -y en movimiento- de las estrellas y otros objetos celestes.
Se conoce como proyectores Zeiss a los integrantes de la línea de proyectores de planetario fabricados por la Carl Zeiss Company. Los principales modelos incluyen al Copernican (1924), Model I (1925), Model II (1926), Model III (1957), Model IV (1957), Model V (1965), Model VI (1968), Spacemaster (1970), Cosmorana (1984), Skymaster ZKP2 (1977) y Skymaster ZKP3 (1993).
Para despedir a la La Hormiga del domo, el Planetario de Bogotá invita a una jornada de sus tradicionales Shows en vivo bajo las estrellas el sábado 15 de julio, con funciones gratuitas cada media hora de 9:00 a.m. a 3:30 p.m.
Adicionalmente, el viernes 14 de julio a las 5:00 p.m. tendrá lugar el encuentro 5000 ojos mirando al cielo: proyecto DESI, en el que se presentará un show para domo creado por el Planetario Fiske y el equipo científico de DESI, utilizando el sistema de proyección digital del escenario, acompañado de un conversatorio sobre esta misma temática.
Debido a los trabajos para adecuarlo, el Planetario de Bogotá cerrará sus puertas a partir del 17 de julio hasta mediados de de agosto de este mismo año. Sin embargo, el domo permanecerá en arreglo hasta septiembre.