La revolución que plantean los chips M1 de Apple ha hecho que todos volvamos la mirada: Intel y AMD aún tienen mucho que decir, seguro, pero el interés sobre los fabricantes de chips con arquitectura ARM es cada vez mayor.
Qualcomm es probablemente el más destacable por sus incursiones en el segmento de los ultraportátiles con la colaboración de Microsoft, pero atentos a MediaTek: la empresa vendió más chips móviles que nadie en el tercer trimestre de 2020, pero además acaba de presentar dos SoC destinados a Chromebooks que comienzan a apuntar alto.
MediaTek viene pisando fuerte
La consultora Counterpoint revelaba estos días un dato singular: MediaTek lograba superar a la mismísima Qualcomm durante el tercer trimestre de 2020, y en ese periodo logró hacerse con el 31% de cuota de mercado, superando el 29% de Qualcomm.
MediaTek ha aprovechado la caída de Samsung, que pasaba del 16% al 12% de cuota respecto al mismo periodo de 2019, y también la de la propia Qualcomm, que reducía ligeramente esa cuota del 31 al 29%. Nadie ha vendido más chips para smartphones que MediaTek en los meses de julio, agosto y septiembre de 2020, pero es que esa es solo parte de la historia.
Puede que no oigamos hablar mucho de MediaTek: los Snapdragon de Qualcomm parece dominar el mundo de los smartphones de gama media y alta, pero según Counterpoint las propuestas de MediaTek son extremadamente populares en móviles de entre 100 y 250 dólares, y tanto China como India han ayudado a que esa cuota de mercado crezca de forma notable.
Hay otro factor interesante en el auge de MediaTek: "la cuota de chipsets de MediaTek en Xiaomi se ha incrementado en más de tres órdenes de magnitud desde el mismo periodo del año pasado", pero además la firma se ha aprovechado del veto sufrido por Huawei, y los chips de MediaTek que fabrica TSMC han sido la opción ahora por muchos OEMS que ya no pueden (o no quieren) aprovechar las propuestas de Huawei.
Qualcomm domina el mercado en SoCs con conectividad 5G, pero cuidado aquí porque la familia Dimensity de Mediatek también quiere "democratizar" esa conectividad en terminales más asequibles. De lo que no habla Counterpoint es de algo que potencialmente puede determinar el futuro de este y otros fabricantes de chips ARM: el salto a modelos para portátiles e incluso PCs de sobremesa.
Primero los Chromebook, después quién sabe
Mediatek anunciaba a principios de noviembre la llegada de sus MT8192 (fabricado con fotolitografía de 7 nm) y MT8195 (que va más allá y está fabricado en 6 nm), dos SoC que estaban específicamente orientados a futuros Chromebook basados en el sistema operativo Chrome OS de Google.
Mientras que los MT8192 están pensados para equipos algo más modestos, los MT8195 son especialmente prometedores por esa fotolitografía y por contar con ocho núcleos, cuatro de los cuales son ARM Cortex-A78. Estos últimos, aun no siendo rivales aún para Intel o AMD, son un primer paso que marca esa ambición de esta empresa por dar el salto a ultraportátiles, portátiles y quizás equipos de sobremesa.
ARM tiene los Cortex-X1 preparados para ir un más allá en ese ámbito, y precisamente estamos esperando la llegada de los Exynos 2100 de Samsung, que según los rumores los usarán y llevarán su rendimiento al nivel del de los Snapdragon 888... o quizás por encima.
El chip más avanzado de MediaTek para Chromebooks es por tanto llamativo, pero parece quedarse en realidad a medio camino si tenemos en cuenta que ARM tiene desde mayo preparado el Cortex-X1 para dar un salto más contundente a la hora de conquistar PCs y sobre todo portátiles.
Parece una vez más que el problema de plantar cara al Apple M1 no es tanto de los fabricantes de SoC (que quizás vayan algo por detrás, pero no tanto como podría pensarse), sino de Microsoft, que debe dar un golpe en la mesa y ofrecer un Windows 10 ARM mucho más solvente y sin las limitaciones que se le han visto hasta ahora en el ámbito de compatibilidad de aplicaciones.
Esas mejoras ya están en camino, pero a falta de anuncios oficiales parece que 2021 será un año algo confuso para el mercado de los PCs y portátiles, que podrían estar debatiéndose entre el enfoque tradicional x86 o esa nueva fiebre por micros ARM que han despertado los nuevos Mac con el chip M1.