Que Xiaomi ha sido el gran animador de la gama de entrada en estos últimos años no sorprende a nadie. El mejor ejemplo lo tenemos en el Redmi 9, un terminal grande, solvente en rendimiento y con una autonomía fantástica pero que sin embargo no deja de tener unos puntos débiles que irremediablemente nos hacen mirar a la etiqueta del precio. No se puede tener todo por poco más de 120 euros.
Ficha técnica del Redmi 9
Xiaomi Redmi 9 |
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Pantalla |
IPS 6,53" |
Dimensiones y peso |
163,32 x 77,01 x 9,1 mm |
Procesador |
Helio G80 |
RAM |
3 / 4 GB |
Almacenamiento |
32 / 64 GB |
Cámara frontal |
8 MP |
Cámara trasera |
13 MP f/2.2 |
Batería |
5020 mAh |
Sistema operativo |
Android 10 |
Conectividad |
LTE |
Otros |
Lector de huellas trasero |
Precio de salida |
3 GB + 32 GB: 119 euros 4 GB + 64 GB: 136 euros |
Que el precio no te engañe: el Redmi 9 pinta bien
Quien diría que por poco más de 100 euros uno iba a ser capaz de sostener un terminal con diseño cuidado, buen acabado y que hiciera más de lo que uno podía esperar a simple vista. Así es el Redmi 9, del que no deberías dejar que su precio te engañara.
En mano, el Xiaomi Redmi 9 es un smartphone cómodo, equilibrado y manejable, con un grosor que supera los 9 mm y peso de 198 gramos. Y estamos hablando de un teléfono que supera las 6.5 pulgadas de diagonal.
El frontal es casi todo pantalla, con marcos reducidos pero apreciables. Su punto fuerte en realidad está en la trasera llamativa y con cierto toque brillante.
El diseño del Redmi 9 no es destacado por su acabado noble, pero es cierto que el plástico usado es de bastante calidad y nos deja un empaque muy conseguido para el precio del equipo. Hay detalles interesantes como la ligera curvatura de la carcasa.
Llama especialmente la atención el acabado con textura algo rugosa que proporciona dos ventajas al dispositivo: mayor agarre y sistema antihuellas. En ambos aspectos, el Redmi 9 consigue su objetivo de manera bastante acertada, aunque de las huellas no nos acabamos de deshacer del todo. Pero como mínimo son menos visibles.
La trasera del Redmi 9 es llamativa no solo por esa textura ondulada sino por los tonos de la carcasa, con toque brillante y algo de degradado que resulta en un equipo que en mano destaca y llama la atención, algo que por poco que cueste un terminal, siempre es de agradecer si precisamente buscas un teléfono que resalte a primera vista.
Una curiosidad: la textura ondulada abarca toda la parte trasera del Redmi 9 a excepción del módulo de cámara, que pese a ser lineal y no circular, queda recogido en un círculo virtual con acabado completamente liso. Ese módulo de cámara sobresale lo justo para poder localizarlo (algo importante como veremos luego para el lector de huellas, pero no altera para nada la estabilidad del teléfono cuando lo tenemos colocado sobre la mesa.
En los laterales quedan colocadas las conexiones físicas, encontrando en el izquierdo la bandeja para las tarjetas SIM (es un terminal dobleSIM) así como una tarjeta microSD para ampliar la capacidad interna.
Ya en la derecha está el sitio para el botón de encendido/bloqueo, bien centrado y accesible. Justo encima podemos alcanzar el control de volumen, que yo personalmente siempre prefiero en el lado contrario para manejarlo con mayor comodidad.
Un detalle que ha cuidado bastante Xiaomi es que el marco, que es también de plástico, nos transmita la apariencia y tacto de metal, y hasta tiene algo de diferenciación con respecto a la trasera, algo que el Redmi 9 agradece.
En el borde inferior se agolpan el resto de conexiones del Redmi 9, a excepción del puerto de infrarrojos que queda en el marco superior. Lo que que no encontramos es LED de notificaciones.
En ese borde tenemos pues el puerto USB-C de carga, un puerto de auriculares de 3.5 mm y el altavoz principal, de sonido bastante potente salvo que tapes su salida, algo que pasará probablemente cuando estás en modo apaisado viendo vídeos o jugando.
El Redmi 9 incluye radio FM (con antena interna aunque poca cobertura respecto a la que conseguimos conectando los auriculares de cable), es Bluetooth 5.0 y WiFi ac. Además, y esto interesa a muchos usuarios de gamas baja de Xiaomi, el Redmi 9 incluye conectividad NFC.
Un último dato: aunque el agarre del terminal es aceptable y no es especialmente resbaladizo, el Redmi 9 trae de serie en la caja una funda blanda transparente que siempre viene bien llevar puesta aunque debes saber que la parte del puerto USB-C lleva una especie de tapa que debes mover para cargar el terminal.
Lector de huellas en la parte trasera
Dentro del módulo vertical que el Redmi 9 ha reservado para las cámaras, hay sitio también para el lector de huellas. Al principio uno puede llevarse una pequeña decepción por este "paso atrás" pero funciona tan bien que nos alegramos de tenerlo ahí.
Es un módulo pequeño bien localizado por el relieve del módulo de cámara, que queda al alcance del dedo más habitual que usaremos para identificarnos en el teléfono, pero que está justo debajo de la tercera cámara en fila del terminal, justo debajo de la misma y por lo tanto, es bastante susceptible de ser tocada sin querer. Ojo con ello pues.
A nivel de funcionamiento, es un lector rápido, fiable y que funciona perfectamente.
El otro sistema de identificación biométrico del que goza este Xiaomi Redmi 9 es el reconocimiento facial, muy rápido en entornos con buena luz y que resulta una gran combinación con la opción de encender pantalla al levantar (o el doble toque sobre la pantalla).
Pantalla grande FullHD+ para lo bueno y lo malo
El Redmi 9 de Xiaomi ofrece al consumidor una experiencia visual de grandes dimensiones. Estamos ante una pantalla de 6.53 pulgadas con resolución FHD+ (2340x1080 píxeles), lo que nos deja una densidad de 394 ppp, muy buena para este tipo de teléfono y su gama. La pantalla viene protegida con Gorilla Glass 3.
La pantalla tiene una proporción pantalla-cuerpo de casi el 90% según el fabricante. Ofrece un contraste de 1500:1 y brillo de 400 nits. El espacio de color que puede abarcar es NTSC 70%.
Como era de esperar, con esos datos, la experiencia con la pantalla más allá del tamaño o resolución, no admite muchas alegrías. Es especialmente problemática con los reflejos en exteriores, donde, a plena luz del día en las horas centrales, es bastante complicado tener una visualización cómoda. También los ángulos de visión son mejorables.
En los ajustes del esquema de colores, donde habitualmente podemos personalizar la experiencia con la pantalla de un smartphone, este Redmi 9 nos deja escoger entre un ajuste de colores automático (el recomendado y donde podemos escoger perfil cálido, frío o personalizarlo) y uno saturado o estándar. En el caso del estándar, el resultado es algo más fiel pero peca de cálido al igual que el primero lo hacía de frío.
También contamos con modo de lectura, modo oscuro y por supuesto, la posibilidad de retirar artificialmente el notch tipo gota.
Muy deseable por su gran autonomía
Del apartado técnico de este Redmi 9 nos interesa detenernos en el procesador, un MediaTek Helio G80 (GPU Mali G52) con un rendimiento correcto para el perfil de este terminal. Incluso nos podemos atrever con algún que otro juego con solvencia siempre que sea casual y no muy exigente.
Le acompaña memoria RAM de tipo LPDDR4X de hasta 4 GB (en la versión con memoria interna de 64 GB, hay otro modelo, el asequible, que combina 3 GB + 32 GB), consiguiendo un comportamiento bueno para el precio del equipo, aunque eso significa que si le pedimos solvencia con apps pesadas, los resultados ya no acompañen. Incluso con la interfaz de MIUI 11 hay momentos en que notamos una clara ralentización y tirones.
En las pruebas técnicas las cifras de este Redmi 9 nos dejan claro que es solvente allá donde lo necesita pero no mucho más. En PCMark arrojó una cifras medias de 8732 puntos, mientras que en Antutu superó los 202000 puntos, los 1282 en Multi-Core de GeekBench (357 en Single Core) y en la parte gráfica nos permitido jugar por encima de los 60 fps de media sin problemas en juegos no muy exigentes. Pero un juego tipo Fornite la experiencia no supera los 15 fps y reduciendo bastante las prestaciones. No es un terminal para jugar en serio.
Y pasamos ahora a hablar de la batería, que es el gran pilar de este Redmi 9. Son 5020 mAh que dan para mucho. Concretamente para superar sin problemas los dos días de autonomía en escenarios de uso no muy intensivo, que a priori parece adecuado para este tipo de terminal. De media hemos conseguido rondar siempre las 10 horas de pantalla, con una cifra en el test de PCMark de 12 horas y 25 minutos.
En un terminal con un precio por debajo de los 150 euros, hay sacrificios que se entienden. El de este Xiaomi Redmi 9 lo encontramos en el cargador que viene de serie, que es de 10 W (USB-C) pese a que el terminal admite la carga QC 3.0 y carga rápida de 18 W.
Para un equipo con más de 5000 mAh esto se traduce en tiempos de carga largos. Partiendo de entre un 7-10% de batería de media, los tiempos de carga que hemos medido han sido de casi media hora para alcanzar el 25% de carga de la batería, casi 65 minutos para llegar al 50% y con la habitual ralentización de la carga rápida al final, la batería no completa su capacidad hasta pasadas casi tres horas.
Como siempre, la prueba de carga la realizamos con la conectividad del terminal funcionando todo el tiempo en segundo plano, una situación que consideramos que se adecúa más a la realidad del usuario destinatario de este equipo.
Android 10 bajo MIUI 11
Aunque no debería tardar mucho en adoptar la actualización MIUI 12, el Redmi 9 que hemos podido analizar todavía mantiene la versión 11 de la capa de Xiaomi sobre Android 10.
El funcionamiento es en general fluido, pero en el día a día con el terminal hemos tenido momentos en que el sistema parecía superar a las capacidades ejecutoras del Redmi 9, con toda una pantalla FullHD+ que mover. Viene lógicamente algo cargado de software preeinstalado, entre ellos Aliexpress, Facebook, eBay, WPS Office, Netflix o Linkedin. También unos cuantos juegos casuales.
Por lo demás, es una capa conocida con bastantes servicios y aplicaciones asociadas al ecosistema de Xiaomi así como lo esencial hoy en día en un terminal, desde aplicación para gestionar el rendimiento hasta controles de audio avanzados, posibilidad de personalizar cómo queremos acceder a las aplicaciones o la interfaz del sistema así como gestor de consumo y bienestar digital.
Cuatro cámaras a las que no podemos exigir mucho
La presión del mercado hace estragos en la gama de entrada y la cámara de este Redmi 9 es un buen ejemplo. Si el mercado demanda cuatro cámaras, ahí que las ponemos en un terminal de 120 euros pese a que, a priori, no podemos exigirle demasiado. Veamos cómo ha sido el resultado en este Xiaomi Redmi 9.
El equipamiento a nivel fotográfico de este Redmi 9 viene conformado por un sistema de cámara cuádruple donde el sensor principal es de 13 MP con apertura f2.2.
Como cámaras secundarias funcionales tenemos el gran angular, con 8 MP de resolución, f2.2, enfoque fijo y apertura de 118 grados, así como el sensor para las fotos macro, que es de 5 MP con f2.4 y enfoque fijo. Completa el cuarteto fotográfico un sensor de profundidad (2 MP) para ayudarnos en el modo retrato.
En la interfaz no hay sorpresas salvo que en algunas ocasiones nos ha dado errores y se ha ralentizado en algunos cambios entre modos en el carrusel fotográfico. Ahí están los tipos de disparos posibles, con especial mención al modo Pro, que si bien no permite tomar fotos en RAW, sí que da algo más de margen para jugar con algunos parámetros de manera manual.
Tampoco me ha gustado que el modo Macro, que recordemos tiene un sensor para él solo, no esté en el modo principal ni como opción primera en la interfaz y para usarlo haya que ir al menú de los ajustes de cámara.
Cámara principal y gran angular
Como hemos indicado, la cámara principal de este Redmi 9 tiene asociado un sensor de 12 MP con apertura f2.2 y un tamaño de apenas 1.12µm. Con esos números es lógico que nos hayamos encontrado unas fotos a plena luz correctas para la gama tanto a nivel de detalle como de colorido, pero que no podemos sacar de su zona de confort.
Con un rango dinámico alto, incluso el modo HDR es incapaz de arreglar las luces altas complicadas de controlar. También tenemos algunos problemas de nitidez en los bordes de la imagen o enfoque algo errático.
Curiosamente, el gran angular, con mismo tamaño de sensor pero menos resolución, encuentra algún margen de mejora en cuanto a nitidez, y es la cámara más solvente de las tres principales cuando la luz es suficiente.
Con la foto a 1X y el gran angular muy presentes en la interfaz, nos encontramos también con el esperado botón para el disparo a 2X. Pero ese zoom, por mucho que esté destacados, no es más que un recorte sobre la imagen principal, que nos da apenas para fotos que no vayamos a enseñar más que en nuestro teléfono móvil (y eso cuando hay buena luz) o algún desenfoque de fondo algo forzado.
Todo lo dicho sobre la cámara del Redmi 9 a plena luz del día y en condiciones favorables se desmorona cuando cae la noche. Tanto en interior como especialmente de noche, el Redmi 9 apenas puede mantener el tipo.
Y lo hace mejor en el resultado final que cuando hacemos la fotografía, momento en que especialmente con el enfoque hemos tenido bastantes problemas. Y además sin modo noche que nos pueda auxiliar.
Fotos con Macro y retratos: muy limitadas
La tercera cámara "real" de este Redmi 9 es la que tiene al sensor Macro como protagonista. Quizás un campo de acción menor para darle un lugar en el terminal, pero ahí está.
Esta cámara nos permite enfocar con una aproximación de unos 4-5 cm. Literalmente pues el enfoque es fijo.
Los resultados siempre dependerán de nuestro pulso y de la luminosidad de la escena. Con ensayo-error y mucha paciencia es una cámara a la que podemos sacarle algo de partido si ésta es un tipo de fotografía que nos atrae.
En cuanto a la cámara selfie, la trasera, es de 8 MP con enfoque fijo, una cobertura de 77.8 grados y apertura f2.0. Ofrece de nuevo resultados solo correctos. Menos precisión hay en el modo retrato para dicha cámara selfie.
Por cierto, no nos hemos olvidado del modo retrato, que tiene su modo concreto en el carrusel de la interfaz pero que me ha parecido bastante limitado por la distancia a la que hay que hacer el modo retrato como por el bokeh básico que consigue.
El vídeo, tan discreto como el apartado fotográfico, no va más allá de la grabación a 1080p y 720p, a 30 fps en ambos casos. Sin estabilización, por supuesto.
Redmi 9, la opinión y nota de Xataka
Con un catálogo infinito y solapado entre submarcas y terminales propios, Xiaomi deja casi rozando los 100 euros a un terminal como el Redmi 9 que hace unas generaciones era una referencia.
Sobre el papel y mirando siempre su precio, el Redmi 9 ofrece un diseño cuidado, gran pantalla y sobresaliente autonomía. Poco más se puede pedir en esta gama.
Sin embargo, el brillo de la pantalla, problemas de fluidez y sobre todo, la cámara mediocre a poco que escasee la luz, deja a este Xiaomi como un producto superable por terminales de la propia marca y por muy poco precio más. Complicada decisión si no tienes presupuesto tan ajustado.
7,8
A favor
- Una autonomía sobresaliente para un terminal idóneo en la gama de entrada
- Buen acabado y apariencia
- Extras como el lector de huellas funcionan a la perfección. Y tenemos NFC
En contra
- Ecosistema Xiaomi por todos lados y falta de fluidez
- Con luz directa sobre la pantalla, la legibilidad de la misma es casi nula
- Ir más allá de la foto rápida con buena luz nos deja resultados mediocres
El terminal ha sido cedido para la prueba por parte de Xiaomi. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas.
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