Cuando estamos evaluando un teléfono para comprar, por lo general miramos aspectos como la pantalla, el fabricante, la batería y el tamaño del teléfono. Sin embargo, cuando hablamos de rendimiento, los dos aspectos más relevantes son el procesador del teléfono y la RAM.
Por más que un teléfono tenga el mejor diseño y elementos externos, el procesador y la RAM son los dos componentes que dictan casi directamente el rendimiento del teléfono. Después de todo, no quisiéramos tener un teléfono que luce muy bien pero que anda terriblemente lento.
Entendiendo mejor los procesadores
Los procesadores de los teléfonos que utilizamos suelen ser el componente interno más importante. Un buen chip dicta aspectos como la calidad de la cámara, la conexión a redes y en general qué tan rápido y fluido será el teléfono.
Hoy en día tener ocho núcleos se ha convertido en el estándar en el mundo Android, mientras que Apple usa otra métrica completamente diferente. En todo caso, cuando hablamos de núcleos, casi siempre más será mejor.
Un buen procesador también se traduce en un mejor rendimiento o mayor calidad gráfica al momento de correr videojuegos, por lo que quienes busquen equipos para gaming por lo general deben siempre fijarse en el procesador del teléfono.
En Colombia, los chips más populares son los de MediaTek. En su momento el G88 y el G85 dominaron casi totalmente el mercado de los teléfonos alrededor y por debajo del millón de pesos. En segmentos de más de ese valor empezamos a ver a Qualcomm, con sus Snapdragon y Samsung insiste con sus Exynos.
En términos generales, no existe una palabra final para decir que los chips Snapdragon son mejores que los de MediaTek, ya que por lo general tienden a competir en mercados distintos. Pero sería absurdo negar que una de las grandes ventajas de los iPhone viene de sus procesadores, fabricados por la misma Apple.
¿Cómo impacta la RAM el rendimiento del equipo?
La RAM (Random Access Memory, en inglés) se refiere al almacenamiento temporal de alta velocidad que permite abrir y ejecutar aplicaciones en nuestro teléfono. Esta memoria es temporal, lo que quiere decir que se borra cuando se cierra la aplicación.
Un teléfono con buena RAM se sentirá mucho más fluido al momento de abrir y cerrar aplicaciones. Por ese motivo, cuando hablamos de RAM, siempre más será mejor.
En términos generales, 4GB de RAM es una señal de un teléfono de la gama de entrada. La mayoría de teléfonos en Colombia con precios rondando el millón de pesos tienen 6GB o incluso 8GB.
Incluso los teléfonos más potentes del mercado, como el Samsung Galaxy S23 Ultra y el S24 Ultra, suelen tener entre 8GB y 12GB.
¿Es mejor tener más procesador o RAM?
La verdad, la respuesta varía de acuerdo con el usuario. En cualquier caso, un teléfono con un procesador mediocre o baja RAM se notará muy lento y poco fluido en tareas cotidianas.
Para alguien que busque un teléfono aceptable para tareas regulares, 6GB de RAM es lo recomendado, acompañado por un procesador como el Helio de MediaTek. Si se quiere tener el mejor desempeño en videojuegos, es mejor tener por lo menos 6GB de RAM y procesador Snapdragon o Dimensity.
Teléfonos como el Tecno Pova 5 destacan para videojuegos justamente porque combinan un procesador de rendimiento superior con 6GB u 8GB de RAM.
Para la mayoría de personas 6GB de RAM es más que suficiente, a menos que abran una cantidad considerable de aplicaciones al mismo tiempo. En muchas ocasiones es difícil notar la diferencia entre 6GB y 8GB, por lo que puede que en ese caso sea mejor optar por un teléfono en el mismo rango de precio pero que tenga un mejor procesador.
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