Han pasado más de 120 días desde que Apple puso su iPhone 14 en las tiendas de Estados Unidos y comenzó a desplegarlo por la mayoría de los países en donde tiene mercado. Esa mayoría, sin embargo, no incluyó a Colombia... hasta ahora.
Según reportan los retailers encargados de distribuir los teléfonos de Apple en Colombia, se da por inminente la llegada del popular smartphone a Colombia y, si se cumplen los pronósticos, todas las versiones del iPhone 14 llegarían al país a principios de febrero –casi 4 meses después del lanzamiento mundial.
No hay, en todo caso, una fecha oficial y de hecho, después de confirmar originalmente que la llegada del equipo al país se produciría el 28 de octubre, la compañía se retractó y borró el pie de nota del comunicado original.
La demora, por supuesto, se deriva de un pleito entre Ericsson y Apple, que llevó a un juzgado a prohibir la comercialización en Colombia de dispositivos que usaran los componentes o tecnologías sujetos de la reclamación, relacionados con sus capacidades 5G.
Pero en noviembre del 2022, el Tribunal Superior del Distrito Judicial Sala Civil en Bogotá revocó la prohibición de Apple para vender dispositivos 5G, lo que no solamente abrió las puertas a la venta del iPhone 14, sino también de otros modelos anteriores y de algunos iPad.
Si bien Apple no se ha pronunciado al respecto, la espera de varios meses para que lleguen los equipos, incluso después del aval del Tribunal, puede tener como origen factores logísticos o de cargamento. Según Ericsson, Colombia representa apenas un 0,2% del mercado global de Apple.
La disputa entre Ericsson y Apple
Cuando se publicó el comunicado oficial en donde Apple anunciaba la venta del iPhone 14 en Colombia, sus términos iban directamente en contra de la prohibición que pesaba sobre la compañía para vender equipos 5G. Es la definición de ironía porque ni entonces ni ahora existen en COlombia redes 5G que hagan uso de las patentes que provocaron toda la disputa en primer lugar.
Ericsson hizo pública una demanda en países como Brasil y Alemania, entre otros, y exigió a Apple pagar 5 dólares por cada equipo vendido que integre tecnología 5G que considera de su propiedad. Según la empresa sueca, Apple dejó de pagar una licencia para el uso de los componentes 5G y estaría infringiendo una patente vigente desde 2019 y que tiene validez hasta 2037.
En virtud de la decisión de un juez, en julio de 2022, Colombia fue el único país en imponer una prohibición como medida cautelar mientras el Tribunal examinaba el caso y las patentes en cuestión. Técnicamente toda la familia del iPhone 13 también debería estar incluida en la prohibición, pero el hecho de que ese terminal ya estuviera en el mercado hizo más difícil hacer cumplir la medida.
No fue, por supuesto, el caso del iPhone 14, que fue anunciado y lanzado precisamente en el periodo en el que la medida cautelar estaba activa y eso paralizó por completo la venta del teléfono. De hecho, la prohibición no solamente incluye a los aparatos en sí, sino también al material publicitario que ya debería haberse ubicado en tiendas e incluso a la promoción en redes sociales.
El 'mercado gris'
Curiosamente, aunque Apple no tenía permiso para vender los equipos en el país, la compañía sí recibió la homologación para el iPhone 14 desde septiembre de 2022 por parte de la Comisión de Regulación de Comunicaciones.
Nació así un 'mercado gris', en el que algunos comerciantes ofrecían traer el iPhone 14 al país y los compradores , de hecho, hallaban que podían usarlo en Colombia, pero con los riesgos asociados a equipos que no cuentan con el sistema de respaldo que da la distribución habitual.
Esto no hizo sino inflar los precios del equipo. El modelo más sencillo del iPhone 14 cuesta unos 800 dólares, o el equivalente, con la tasa de cambio del 20 de enero, a 3.738.384 pesos colombianos. Sin embargo, en las tiendas que lo ofrecen, se vende por precios cercanos a los 5 millones.
Es por eso que la posible llegada en febrero del iPhone 14 a Colombia representa no solamente un golpe en contra de las pretensiones por parte de Ericsson, sino un golpe directo a ese 'mercado gris' y una medida de tranquilidad para los interesados en adquirir el equipo y disponer de opciones transparentes en cuanto a mantenimiento y entrada de repuestos en el país.