Quizás no lo sabías, pero hoy en día muchos celulares y televisores permiten compartir la pantalla de un smartphone, ya sea Android o iPhone, con un televisor, y lo mejor es que hacerlo es mucho más fácil de lo que imaginas.
Esta función es muy útil porque te permite disfrutar de fotos, videos, presentaciones, aplicaciones y más en una pantalla más grande. Existen diversas formas de hacerlo, ya sea con una Smart TV, dispositivos externos o mediante cables.
En este apartado queremos contarte cómo puedes compartir la pantalla de tu celular en un televisor.
Smart TV
Si tienes una Smart TV, es posible que ya cuente con tecnologías como Miracast, Chromecast o AirPlay, que facilitan la conexión inalámbrica. En dispositivos Android, el proceso consiste en activar la función de "Screen Mirroring" o "Transmitir" desde el menú rápido del celular, siempre que el televisor sea compatible.
Por su parte, los usuarios de iPhone pueden usar AirPlay abriendo el Centro de Control y seleccionando "Duplicar pantalla". Estas opciones permiten que la pantalla del celular se refleje en el televisor en cuestión de segundos.
Cuando el televisor no tiene tecnología integrada, los dispositivos externos son una excelente alternativa. Chromecast, por ejemplo, se conecta al puerto HDMI y se configura mediante la app Google Home.
Desde allí, es posible transmitir aplicaciones compatibles o incluso duplicar toda la pantalla del celular. Los usuarios de iPhone pueden optar por un Apple TV, que utiliza AirPlay para una conexión fluida.
HDMI
Otra opción práctica y estable es la conexión mediante cables HDMI. Para dispositivos Android, se necesita un adaptador USB-C a HDMI, mientras que para iPhone, un adaptador Lightning a HDMI. Esta solución es ideal para evitar retrasos y garantizar una experiencia sin interrupciones.
Por último, existen aplicaciones de terceros como Duplicar Pantalla Móvil que ofrece funciones adicionales para transmitir contenido desde el celular al televisor.
Estas apps suelen ser compatibles con la mayoría de los dispositivos y son útiles cuando no se dispone de tecnologías integradas ni dispositivos externos.
Independientemente del método elegido, es importante asegurarse de que el celular y el televisor estén conectados a la misma red Wi-Fi. Además, mantener actualizados el software de ambos dispositivos puede evitar problemas de compatibilidad y mejorar la experiencia de uso.
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