"Adobe ya no será compatible con Flash Player después del 31 de diciembre de 2020". Seguramente muchos hayáis recibido este mensaje al iniciar vuestro equipo con Windows en los últimos días. Adobe anunciaba así el fin de una era e instaba a los usuarios a desinstalar ese componente que durante 25 años nos ha acompañado.
Esa muerte largamente anunciada hace que a partir del próximo 12 de enero incluso gente que tenga el componente instalado no pueda usarlo. Los navegadores modernos renegarán de Flash, pero hay varios esfuerzos que permitirán que juegos y animaciones pervivan de forma independiente, y quien quiera disfrutar (o sufrir) esas experiencias, podrá seguir haciéndolo a pesar de esa muerte oficial de Flash Player.
Flash Player puede morir, pero no debemos olvidarlo porque es parte de nuestro pasado
La tecnología Flash conquistó el mundo a finales de los 90 y principios de los 2000, y con ella Adobe consiguió plantear una forma fantástica para que animadores y desarrolladores de juegos y aplicaciones tuvieran una alternativa en la que los contenidos web podían enriquecerse de una forma nunca antes vista.
Ese pasado fue truncándose poco a poco. Jobs y su célebre veto a Flash en iOS marcaron un punto de inflexión en una tecnología que, recordémoslo, fue pilar fundamental del funcionamiento de YouTube hasta 2014.
En los últimos años ese soporte ha ido desapareciendo lenta pero inexorablemente, y Flash Player dejará de estar soportado por Adobe y los navegadores modernos. Eso impedirá que podamos acceder a estos contenidos de forma sencilla, pero no significa que los juegos y animaciones queden relegados al olvido.
De hecho hay varios esfuerzos para preservar todo ese contenido. Como señalaban en Fast Company, distintas iniciativas lo permitirán, y harán que quienes quieran rescatar esos juegos y animaciones puedan hacerlo, al menos de forma parcial.
Una de las más interesantes es la que plantea Flashpoint un proyecto de preservación de juegos web que desde principios de 2018 aglutina más de 70.000 juegos y 8.000 animaciones en distintas plataformas, con protagonismo claro de Flash. Es posible descargar el fichero, pero cuidado, porque pesa 478 GB (532 GB descomprimido) y tendréis por tanto que disponer de bastante espacio en disco.
Hay otras alternativas: The Internet Archive mantiene también un buen catálogo de juegos y animaciones Flash. Para lograrlo hacen uso de Ruffle, una capa de emulación que también podremos instalar en nuestra máquina para seguir accediendoa esos contenidos.
Un servicio llamado Conifer también rescata esta tecnología y permite que usemos un navegador en una versión antigua con soporte Flash y que reside en un servidor remoto. Y curiosamente Adobe ha ofrecido una licencia especial de Flash Player a un desarrollo llamado Newgrounds que también permite reproducir juegos y animaciones Flash a pesar de la muerte del componente original en navegadores modernos.
Así pues, Flash Player muere, sí, pero el contenido afortunadamente pervivirá para todos los que quieran seguir accediendo a él, algo que demuestra esa cada vez más relevante ambición por preservar todo aquello que formó parte de nuestro pasado tecnológico.
Vía | Fast Company