Apple ha manifestado en diversas ocasiones su intención de seguir manteniendo tanto macOS como iOS por separado, pero en los últimos tiempos las líneas entre ambas plataformas se han ido difuminando y esa convergencia de Apple podría llegar a ser mucho más sólida en 2021.
Ese es el momento en el que Apple quiere crear aplicaciones únicas y universales que hagan que una misma herramienta sea válida tanto para iOS como para macOS. Esta opción forma parte del proyecto Marzipan y de hecho ya hemos visto algunas pinceladas de ese esfuerzo en macOS 10.14 Mojave.
Apple se inspira en Microsoft
Las versiones de varias aplicaciones de iOS que llegaron a macOS hace unos meses son tan solo un primer paso para ese objetivo que ya no hará necesario un fichero binario para iOS y otro para macOS: la misma aplicación servirá indistintamente para cualquier dispositivo móvil u ordenador de Apple.
Para dar vida a este ambicioso proyecto los desarrolladores dispondrán de un nuevo SDK que según la exclusiva de Bloomberg será desvelado en la conferencia para desarrolladores WWDC de este año. Primero será posible trasladar aplicaciones del iPad al Mac, y luego ese soporte se extenderá a las aplicaciones del iPhone para ofrecerlas en macOS.
Este proyecto plantea básicamente lo mismo que planteaba Microsoft con sus aplicaciones universales. La diferencia, claro, es que la plataforma móvil de los de Redmond fracasó, algo que ha hecho que esa búsqueda de binarios únicos e independientes de la plataforma haya quedado en segundo plano para Microsoft.
Apple, que sí tiene ambas plataformas en funcionamiento, podría beneficiarse de este concepto sobre todo para dar a los Mac acceso a ese ingente catálogo de aplicaciones de los iPhone y los iPad.
En Bloomberg apuntan además a un dato interesante: 2020 es el año en el que también se espera que Apple comience a hacer la transición de algunos de sus Mac a chips ARM en lugar de los chips de Intel. Ese rumor se ha ido acrecentando en los últimos tiempos, y esa convergencia hardware-software parece ir muy en la línea de la filosofía de Apple.
Es inevitable preguntar cómo resolverán las diferencias en la interfaz de uso: en el Mac todo se hace con ratón y teclado, mientras que en el iPhone y en el iPad (con algunas excepciones) el manejo es totalmente táctil. Será interesante ver cuál es el resultado de trasladar a un equipo de sobremesa o portátil aplicaciones pensadas para un teléfono.
Vía | The Verge